Roko Baturina está más cerca de volver al Racing de Santander, cumpliendo de esta manera el deseo de José Alberto. Y es que, el Ferencvaros, de quien es propiedad el delantero croata, ha fichado a un nuevo jugador atacante. Por lo que el conjunto húngaro le ha mostrado la puerta de salida al killer balcánico. 

El número 11 de los verdiblancos de la recién acabada temporada, ha hecho unos buenos números que le han hecho ser el jugador revelación del equipo. Un hombre que cuando aterrizó en Santander dio muchas dudas a la afición, pero que, partido tras partido, se ha convertido en un ídolo de los cántabros.

El delantero nacido en Spilit ha jugado catorce partidos, en los que ha dado tres asistencias y ha marcado cuatro goles. Unos tantos, que han servido para que los de El Sardinero se llevasen los tres puntos en algunos encuentros, debido a una mínima ventaja en el videomarcador.

Baturina se encuentra a gusto en Santander, tal y como comentó en una entrevista ofrecida por el Diario Alerta, en la que dijo que “no tendría ningún problema” en continuar jugando en el Racing, porque se siente “muy bien y muy contento desde el primer día”.

En esa misma entrevista, el delantero apuntaba que se siente “muy feliz” en Santander, pero su continuidad bajo las órdenes del técnico asturiano es “cosa de dos clubes (Racing y Ferencváros).

Aparte de lo deportivo, otro motivo para continuar su aventura en Cantabria es que el croata es un ídolo de masas y hasta la propia afición le ha dedicado una canción al ritmo de los Picapiedra, que ha retumbado en la grada cada fin de semana, tanto en la local, como en la rival.