04.05.2024 |
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Borrajo cierra ‘a lo grande’ el Europeo Máster de Trail

El atleta cántabro  consiguió dos medallas más en Madeira: oro individual en la categoría m55 y oro en m45 con la selección española

Gran cosecha de medallas para el atleta cántabro en Madeira.
Gran cosecha de medallas para el atleta cántabro en Madeira.
Borrajo cierra ‘a lo grande’ el Europeo Máster de Trail

Fernando Borrajo del Río ha finalizado su periplo por tierras portuguesas sumando otras dos medallas, esta vez en el Campeonato de Europa Máster de Trail celebrado en Madeira. El oro individual para el atleta del Piélagos llegó ayer en la prueba de 31 kilómetros. El cántabro subió a lo más alto del podio tras parar el crono en 3:47:37, un tiempo que unido al de sus compañeros españoles Toni Santisteban y Javier Bisbal les valió para conseguir también el oro por equipos en M45. El sábado, Borrajo fue plata en individual y por equipos en la modalidad de subida.

El atleta cántabro nos cuenta desde el aeropuerto su última carrera: «Amaneció el día en Porto Moniz (Madeira) con lluvia, como los anteriores, que invitaba poco a ponerse en pantalón corto y camiseta de tirantes para disputar el I Campeonato de Europa Máster de Trail -31 kilómetros y 4.000 metros de desnivel acumulado-. Tras pasar el ‘control Covid’ de temperatura y el del material obligatorio a portar durante la carrera, se dio la salida por grupos de edad, con la presencia de cinco españoles».

«Desde la salida comparto carrera con el portugués Ricardo Jardin, comandando la misma durante todo el recorrido. Me doy cuenta que el rival que llevo tiene fuerte musculatura y está curtido en este tipo de carreras, así que se presenta complicado el campeonato. Pasamos el primer control juntos, situado en el km 6, tras haber ascendido por veredas, desde el mar a 600 metros, entre terrazas de viñedo y lavadas. Al poco tiempo nos pasa la primera mujer de la carrera, la belga Charlotte que va muy fuerte y viene de ganar el Campeonato de Montaña dos días antes. En el pronunciado y técnico descenso, debido al barro y lo resbaladizo del terreno, que nos vuelve a llevar al nivel del mar, Ricardo Jardin me toma delantera, pasando por el segundo control y lugar de avituallamiento situado en el km 11, con cerca de un minuto de ventaja. Aquí cargo botellín de isotónico. A partir de este punto comienza de nuevo una continua ascensión de 1.150 metros, hasta la cima situada en una campa en Fanal.

Próximo al tercer control, situado al final del caserío de Ribeira da Janela, situado en el km 15, la distancia de Ricardo Jardin se mantiene e incluso se incrementa por momentos. En este control como en el resto hay avituallamiento, aquí pido un cuadrado de membrillo, ya que por el tema del Covid no nos dejan tocar ningún alimento.

Nos adentramos de nuevo, como en el Campeonato de montaña, en el bosque de Laurisilva, en el que en algunos tramos parece que estás en la jungla por la espesura, la humedad y el agua que nos encontramos durante el recorrido, interrumpido de vez en cuando por alguna ‘lavada’ -laboriosas obras de ingeniería humana-. Sobre el kilómetro 18,5 doy alcance a Ricardo Jardin, que parece flaquear algo, he intento acelerar el ritmo para distanciarme aprovechando la bruma-niebla que nos envuelve.

Por el cuarto control, en la cumbre de Fanal, kilómetro 20,5, logro pasar primero, por delante de Ricardo Jardin. Aprovechó para avituallarme tomando un caldo caliente con trozo de pollo sobre la marcha, y recoger el bidón de agua con sales y el gel, que el día anterior había dado a la organización para su entrega en este punto.

A partir de aquí comenzaba de nuevo, un largo y técnico, descenso para volver  al Cámping de Janela, al borde del mar. El descenso requiere hacerlo, como el resto de la carrera, con mucha concentración por los múltiples cruces que nos encontramos, siendo fácil tomar el camino equivocado, y también por lo cambiante del suelo que pisamos lleno de raíces, piedras resbaladizas, ramas, troncos, barro y pequeños regatos de agua. Sobre el kilómetro 24, Ricardo Jardin me vuelve a pasar y justo cuando me supera, casi me tengo que detener por calambres en el isquiotibial de la pierna izquierda, que son los músculos que más se resienten en las bajadas muy pronunciadas. Tomo un par de cápsulas de sales para combatir la falta de hidratación que me ha provocado los calambres, y afortunadamente, me hacen efecto rápidamente.

Paso por el quinto y último control en la Iglesia de Janela, kilómetro 28, y veo en la lontananza al atleta portugués, que sigue descendiendo rápido y seguro, ahora por callejas de piedra adoquinada y largas escaleras todo muy resbaladizo, que desembocan en Puente, sobre el Cámping de Janela, y que a mi, que soy un ‘maleta’ bajando, me penaliza bastante. Desde este punto quedan 1,8 kilómetros a meta por carretera, a través de dos largos túneles.

Al llegar al asfalto, en una vuelta de herradura, veo que Ricardo Jardin me saca aproximadamente unos 300 metro. Llego, como se dice en el ‘argot runner’, ‘bien de piernas’, así que toca echar el resto, y hacer casi el 2.000 que resta a ritmo de series de 500. Paso el primer túnel y veo al portugués ‘a tiro de piedra’, a mitad del segundo le rebasó y quedan menos de 600 metros. Mi pulsómetro marca en este último kilómetro 170 pulsaciones y ritmo de 3:30.  Durante 200 metros interminables oigo sus zancadas cada vez más débiles, ambos nos estábamos jugando el Campeonato de Europa de la categoría. Llegamos a la rotonda de entrada a Porto Moniz y empiezo a creer en la victoria, a partir de aquí callejeando, 3 o 4 cruces y arco de meta en una pequeña recta y me veo que toda la suerte del mundo me ha tocado ese día a mí. Cruzo la meta como primer campeón de Europa Máster de la categoría M55, siendo décimo en la general con un tiempo de 3h.47.37. Ricardo Jardin cruzaba la meta a 1:03, al equivocarse de calle en el penúltimo cruce y hacer más recorrido. El italiano Roberto Moretti ocupaba la tercera posición, llegando a escasos 8 minutos.

Para rematar la jornada, tengo que destacar las excelentes carreras que completaron mis dos compañeros de equipo, el catalán Toni Santisteban M45, que finalizó en el puesto 12 y el madrileño Javier BisbalM60, que el terminó en el puesto 19, con ellos conseguimos el título por equipos en M45, siendo el único país que logró concluir la carrera con tres corredores en M45».

La aventura portuguesa de Fernando Borrajo del Río ha sido espectacular con siete medallas: oro en Trail M55 y plata en subida de Montaña M55, a nivel individual; y por equipos otro oro en 10 Kilómetros M55, oro en Maratón M55, oro en Subida de Montaña M55, oro en Trail M45 y plata en Cross por Relevos M50.

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