Después de intensas negociaciones nocturnas entre el Consejo, el Parlamento y la Comisión Europea, se ha alcanzado un acuerdo político crucial para reformar las normas de asilo y migración en la Unión Europea. Este acuerdo se centra en la regulación del procedimiento de asilo, estableciendo procesos comunes que los países de la UE deben seguir cuando las personas buscan protección internacional.

El aspecto más controvertido de este acuerdo es la nueva regulación de cribado, diseñada para permitir a las autoridades identificar rápidamente el procedimiento adecuado aplicable a personas que ingresan a la UE sin cumplir con las condiciones de entrada. El objetivo principal de estas propuestas es reducir y desalentar la migración irregular. Específicamente, se ha decidido que los migrantes de países con bajas probabilidades estadísticas de ser aceptados como asilados (menos del 20%, como Turquía, India o Túnez) serán retenidos en la frontera en centros de asilo que se asemejan a prisiones.

La intención es procesar las solicitudes de asilo en estos centros en un plazo de 12 semanas y, en caso de rechazo, devolver inmediatamente a las personas. Estas medidas buscan agilizar el proceso y garantizar una respuesta rápida a las solicitudes de asilo.

Según datos de Eurostat de 2021 y 2022, las principales nacionalidades de los solicitantes de asilo en la UE incluyen sirios, afganos, venezolanos y colombianos. Los sirios encabezaron el grupo en siete Estados miembros, mientras que los afganos lideraron en seis países. Además, los ucranianos fueron el principal grupo de solicitantes de asilo en seis países en 2022, especialmente en Rumanía.

En lo que respecta a las decisiones sobre solicitudes de asilo en 2022, los Estados miembros de la UE otorgaron estatus de protección a un total de 384,245 solicitantes de asilo, representando un aumento del 40% en comparación con 2021. Estos estatus incluyeron refugiado, protección subsidiaria y protección humanitaria.

Estonia, Bulgaria, Países Bajos, Hungría e Irlanda emitieron más del 80% de las decisiones positivas en primera instancia. Por otro lado, países como Chipre, Malta y Croacia emitieron menos del 20% de decisiones positivas en primera instancia.

Con respecto a las nuevas medidas migratorias, a partir de 2023, los países de la UE retendrán en centros de asilo a personas cuya inmigración por asilo se considere poco probable. Esta decisión se basa en tasas de reconocimiento notoriamente bajas para ciertas nacionalidades al solicitar asilo en la Unión Europea. Estas tasas varían según el país de origen del solicitante, influenciadas por factores como la situación política, las condiciones de derechos humanos y la seguridad en el país de origen.