La reina Isabel II de Reino Unido ha muerto este jueves 8 de septiembre en el castillo de Balmoral, en Escocia. El Palacio de Buckingham ya había adelantado que el estado de salud de la reina Isabel II se había deteriorado en los últimos días. Médicos han atendido a la reina de Inglaterra hasta el último momento en el castillo de Balmoral. Familiares de la monarca se han trasladado al lugar para permanecer junto a ella, incluidos los duques de Sussex. Tras confirmarse la noticia, comienza la 'Operación London Bridge'.

En caso de muerte de un miembro de la Familia Real británica, existen planes estrictos y detallados para lo que sucederá a continuación. Ninguno es más importante que el fallecimiento de la Jefa del Estado. Y es que, cada miembro de la Casa Real británica tiene su propio nombre en clave. En el caso de la Reina, el nombre en clave es 'Operación London Bridge'.

Hace casi un año, en septiembre de 2021, el medio 'Playbook' y el diario 'Político' hicieron públicos varios documentos que revelaban al detalle cómo Reino Unido dirá adiós a Isabel II y cuál será el proceso de actuación ante la muerte de la soberana.

Estos procedimientos incluyen la puesta en marcha de una estrategia de seguridad sin precedentes para la gestión de multitudes y evitar un colapso en la capital de Inglaterra. A continuación, te contamos al detalle el adiós a Isabel II, la 'Operación London Bridge'.

'Operación London Bridge', paso a paso

Desde la muerte de la Jefa del Estado de Reino Unido, comienza un periodo de diez días entre su fallecimiento y el funeral. Se pone el nombre de 'Día D' al día de la muerte de Isabel II, es decir, este jueves 8 de septiembre. Los departamentos gubernamentales de Whitehall recibirán la orden de mantener las banderas a media asta.

Se deben poner en marcha una serie de operaciones en clave como la 'Spring Tide', en la que se habla del acceso de Carlos a la corona. Es un preciso plan que incluye hasta las fórmulas con las que los altos funcionarios comunicarán la noticia a los ministros pidiendo "discreción". Ahora, tras la muerte, esto es lo que ocurre:

Durante las horas posteriores al fallecimiento de la reina de Inglaterra, sucederán un aluvión de llamadas para informar a Liz Truss, al secretario de gabinete y a varios cargos y funcionarios más importantes de Reino Unido. Es la Casa Real la que informa al mundo de la muerte. Aquellos altos cargos que no hayan recibido una llamada serán informados por correo electrónico, será cuando las banderas bajarán a media asta.

Se suspenderá la actividad en el parlamento de Reino Unido y Escocia, como también en el resto de órganos gubernamentales de Gales e Irlanda del Norte. La web de la Casa Real se mantendrá en luto e incluirá una breve declaración que confirma la muerte. El gobierno británico mostrará un banner negro en la parte superior de su web.

Asimismo, todos los perfiles y páginas oficiales gubernamentales lucirán un crespón negro y cambiarán sus fotos de perfil a su escudo oficial. Nada que no sea urgente se publicará y será el jefe de comunicaciones quien autorice los retuits en Twitter. Liz Truss, la primera ministra, será la primera en realizar una primera declaración oficial por parte de Downing Street. Tras ello, mantendrá una reunión con el nuevo rey, Carlos, quien lanzará un mensaje a la nación. Según el protocolo, está previsto un servicio religioso en la Catedral de San Pablo, en el centro de Londres. Asistirán miembros del Gobierno y Truss.

Día después de la muerte de Isabel II

A las 10:00 horas (hora local) de este viernes, el Consejo de Adhesión se reúne en el Palacio de St. James para proclamar al nuevo rey soberano. Acudirán cientos de consejeros privados, la primera ministra y los ministros principales británicos. Posteriormente, se producirá una reunión en el Parlamento británico para lanzar el pésame. A las 15:30 horas (hora local), Liz Truss y el gabinete británico tendrán una audiencia con Carlos como nuevo rey.

Segunda jornada tras el 'Día D'

El Palacio de Buckinham albergará el ataúd de la reina de Inglaterra. Al morir en Balmoral, el ataúd mantendrá reposo en el Palacio de Holyrood y tras un servicio en la Catedral de Edimburgo, se transportará por la estación de Waverley para después seguir por el Royal Train a la capital.

Tercer día tras la muerte

Durante la mañana, el ya proclamado rey Carlos recibirá las condolencias en Westmisnter y por la tarde realizará su tour por el país. Primero acudirá al parlamento de Escocia.

Cuarto día

Aterrizará en Irlanda del Norte el rey Carlos para recibir el pésame en el castillo de Hillsborough. También asistirá a un servicio religioso en la catedral de St. Anne, en Belfast. Al mismo tiempo, comenzarán en Londres los ensayos para la 'Operación Lion', una procesión para llevar el ataúd desde el Palacio de Buckinham gasta Westminster.

Día 5

Westminster albergará una procesión que recorrerá la capital de Inglaterra. La población de Reino Unido podrá decir un último adiós a su reina en caso de que el tiempo sea favorable. En Westminster Hall se producirá un servicio religioso tras la llegada del ataúd.

Procedimientos del día 6 al 9

Isabel II permanecerá en el Palacio de Westminster durante tres días bajo el marco de la 'Operación Puma'. La sala estará abierta al público durante 23 horas al día. Habrá ensayos para la procesión que celebra el funeral de Estado. Carlos viajará a gales el séptimo día tras la muerte para recibir el pésame del parlamento galés y acudir a un servicio religioso en la catedral de Liandaff (Cardiff).

El gobierno de Liz Truss se encontrará preparando un funeral de Estado histórico. El ministerio de Asuntos Exteriores se encargará de organizar las llegadas de los jefes de Estado y grandes figuras del extranjero, así como la llegada de turistas que dirán adiós a Isabel II. El ministerio del Interior se encargará de la seguridad junto con Inteligencia y la Secretaría de Seguridad Nacional.

Décimo día, funeral de Estado

Llega la gran pregunta: ¿dónde se celebrará el funeral de Estado? La Abadía de Westminster albergará el evento. Se producirán dos minutos de silencio en todo el país sobre el mediodía. El cuerpo de la reina Isabel II será enterrado un una tumba de la Cripta Real de la Capilla de San Jorge del Castillo de Windsor en Londres.