07.05.2024 |
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RACING DE SANTANDER

Pernía se libra de la cárcel

El Supremo reduce la pena del expresidente del Racing de 4 años a sólo uno l Le absuelve de los dos casos de apropiación indebida por los que fue condenado y de uno de administración desleal l Su única pena, el Racing Primavera
Francisco Pernía, camino del juzgado. / ALERTA
Francisco Pernía, camino del juzgado. / ALERTA
Pernía se libra de la cárcel

Todo racinguista sabe qué hizo en el Racing y con el Racing Francisco Pernía; qué hizo tanto cuando era presidente como cuando actuaba en la sombra y cómo quiso que terminara la historia, pero una cosa es tenerlo claro y otra que pague por ello. No lo va a hacer. O, al menos, lo va a hacer mínimamente, ya que no va a pasar por la cárcel. Nadie le va a ver con el pijama de rayas porque el Tribunal Supremo ha rebajado su condena de cuatro años a uno. En concreto, le ha absuelto de uno de los casos de apropiación indebida por los que había sido condenado y del delito de administración desleal, lo que ha reducido tanto la pena que, al ser inferior a dos años, no tendrá que pisar el Dueso. Con esa impunidad terminará una historia que en el peor de los momentos pareció que iba a acabar con el club verdiblanco en el cementerio.

La rebaja producida en la pena a pagar por Pernía se debe a que el Supremo ha estimado buena parte de su recurso de casación y, de hecho, incluso le ha aplicado el atenuante de dilaciones indebidas. Desde fuera, dio la impresión de que esa acumulación de retrasos había sido provocada por él mismo, pero los magistrados dicen que no. Y así se va a terminar la historia porque no cabe recurso alguno al auto dado a conocer ayer. Incluso se dejan sin efecto las indemnizaciones civiles acordadas para los hechos de los que ha sido absuelto, por lo que el golpe recibido por el racinguismo que se organizó para intentar que la actuación de Pernía al frente del club tanto a la luz como a la sombra no le saliera gratis ha sido fuerte. La derrota en el campo judicial ha sido importante pero al menos se queda con la victoria de haber echado a los malos a tiempo de mantener con vida a la criatura.

En concreto, quien fuera presidente del Racing entre el 2006 y el 2011 había sido condenado, además de a cuatro años de prisión, a una multa de 3.600 euros y a una indemnización total de 127.327. Sin embargo, al considerar el Supremo que sólo es autor de uno de los casos de apropiación indebida por los que había sido condenado y que es inocente de las acusaciones de administración desleal, Pernía tiene razones para marcharse de fiesta y llegar a la conclusión de que todo mereció la pena.

En concreto, el exdirigente de Cóbreces, que antes de entrar al Racing había sido consejero de Industria y Turismo y de Economía y, posteriormente, secretario general del Partido Popular en Cantabria, había sido condenado por apropiación indebida por la gestión del Racing Primavera y por el pago de facturas por 60.684 euros. De este último caso se ha librado y sólo ha quedado la condena por lo referente a la escuela de fútbol fantasma en Brasil y, en concreto, por desviar 42.970 euros. A su vez, también había sido procesado por administración desleal por la compra de un coche de lujo Audi A8 valorado en 84.000 euros (¿se acuerdan? «algún capricho me tengo que dar») con cargo al club para uso exclusivo y por la indemnización de 100.000 euros a José Campos por despido o rescisión contractual.

MÍNIMA CAUSA. Tras la celebración del juicio, tanto Iñaki Urquijo, que fue nombrado responsable de aquel Racing Primavera y más tarde coordinador de las categorías inferiores del club verdiblanco, como el agente de jugadores Juan Vergara aceptaron un año y medio de prisión cada uno por una condena de apropiación indebida. Así también se libraron de mayores responsabilidades porque la Fiscalía les había pedido inicialmente tres años. Por su parte, solicitaba media docena para Pernía, pero todas esas cifras se han quedado en nada.

De primeras, el expresidente del club verdiblanco recurrió la sentencia inicial de la Audiencia de Cantabria alegando una decena de cuestiones y el recurso fue admitido por la Sala Segunda del Tribunal Supremo, que se reunió para deliberar y decidir a mediados del pasado mes de junio. Finalmente, la sentencia  se firmó casi un mes después, el pasado jueves día catorce. Hay fiesta en Cóbreces desde aquel día.

Los magistrados del Supremo han apreciado «dudas razonables» acerca de la participación de Pernía en el «desvío delictivo de dinero» utilizando las facturas emitidas por la mercantil Sport Rent Consulting SL, por lo que considera procedente su absolución por este motivo. Dudas también «razonables» perciben ante la posible justificación de los pagos cuestionados. «La prueba propuesta por la defensa era de resultado incierto, pero las consecuencias de la incertidumbre no pueden recaer sobre el acusado», explican los magistrados, que, como explicaron ayer algunos de los abogados que se han trabajado la acusación durante años, han sido tremendamente garantistas.

En su recurso, Pernía también denunció la supuesta vulneración de su presunción de inocencia en varios aspectos, entre los que estaban los pagos efectuados a la sociedad Master Freios Ltda. Car Services y sostenía que la «correcta» valoración de la prueba presentada debía estimar «acreditado» que los mismos se hicieron para afrontar gastos del Racing Primavera, de donde nunca salió otra cosa que unos vídeos ridículos de supuestos entrenamientos liderados por el mencionado Urkijo. Sin embargo, los magistrados entienden que «no puede sostenerse que los datos incorporados a esa cuenta contable permitan considerar acreditado que los pagos se hicieron para la escuela».

Pernía también alegó que «ninguna» de las operaciones consideradas delictivas superaba los 50.000 euros, por lo que entendía que «no era procedente apreciar una nueva agravación» en atención a esa cuantía. Es calderilla. Y el Supremo así lo ha entendido también al estimar el recurso. «Es cierto que ninguna de las operaciones delictivas supera esa cantidad, por lo que sólo la suma de las mismas permite aplicar la agravación prevista» en el Código Penal, explica el fallo del tribunal. De este modo, al concurrir una circunstancia atenuante, la pena debe imponerse en la mitad inferior. Es decir, entre un año y tres años y seis meses de prisión y multa entre seis y nueve meses.

Es por ahí por donde ha llegado la mínima condena que finalmente le ha caído a Pernía, ya que el Supremo, además de liberarle de una de las causas por apropiación indebida, considera que no hubo administración desleal. Que, en definitiva, todo el destrozo que hizo en el Racing fue porque, simplemente, era un mal gestor y que en ningún momento intentó aprovecharse del club.

EL AUDI. Respecto al Audi que, según reconoció el mismo Pernía era un capricho que él mismo se daba, afirma el Supremo que tenía «fines de representación» y que nunca hubo intención de incorporarlo a su patrimonio, sino al del club, que fue en el que permaneció «manteniendo el mismo valor». «Sustituyó con él otro similar, de manera que puede sostenerse que el club entendía que era la gama adecuada para esa finalidad de representación. El vehículo se utilizaba para fines sociales no sólo personales del presidente, y no ocultó la adquisición ni el precio de la misma ni las condiciones en que se pactó», resalta el auto judicial. Consideran los magistrados que el uso dado al vehículo «no podía ser ignorado por los órganos sociales cuando el anterior se había utilizado públicamente durante tres años desde su adquisición».

Respecto a la indemnización a José Campos, el Supremo cree justificado que se deba a la «resolución anticipada» del contrato con el empresario hostelero. Considera que Pernía «actuaba en la creencia de que la resolución del contrato a causa de los previos desacuerdos constantes conducía a la justificación de una indemnización». De este modo, considera que el expresidente no tenía por qué conocer «el carácter fraudulento de su actuación, ni la causación de un perjuicio económico que era inexistente, ya que el pago obedecía a una causa consistente en la resolución anticipada de un contrato». De este modo, al admitirse también que no hubo ningún caso de administración desleal en este caso, Pernía sólo ha sido condenado por la apropiación indebida en el caso del Racing Primavera y, por lo tanto, podrá marcharse de vacaciones tranquilo. Él seguirá viendo salir el sol mientras que Harry, a quien puso al frente de todo mientras él seguía en la sombra, sí es posible que tenga que pasar una temporada entre rejas.

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