En un arranque de campaña marcado por la polémica debido a la inclusión de 44 condenados por terrorismo en las lisas de Bildu, el PSOE está decidido a proseguir con su velocidad de crucero en cuanto a anuncios se refiere para tratar de tener iniciativa y superar la polémica. Primero fue una batería de anuncios en materia de Vivienda, con el foco en la construcción de inmuebles para alquiler social. Después inversiones millonarias en Educación cada martes. Ahora el foco se pone en la Sanidad. Anuncios para confrontar con los recortes que, exponen desde el PSOE, se realizaron en la época de gobierno del PP. Y de nuevo Pedro Sánchez anticipando una medida del Consejo de Ministros en un acto socialista.

"En el próximo Consejo de Ministros vamos a inyectar 580 millones para reforzar, rebustecer y modernizar los 13.000 centros de Atención Primaria de toda España", ha dicho Sánchez el acto, en el que han intervenido el presidente de la Comunidad Valenciana, Ximo Puig, y la vicealcaldesa de Valencia, Sandra Gómez, y al que han asistido alrededor de 6.000 personas, según fuentes de Ferraz.

Posteriormente, en Twitter, Sánchez ha destacado que se trata de "la mayor inversión en Atención Primaria hecha nunca en España" y ha detallado que esos 580 millones de euros servirán para "crear nuevas salas de fisioterapia, radiodiagnóstico o urgencias y evitar esperas o desplazamientos innecesarios".

Sánchez ha dedicado prácticamente toda su intervención en el mitin a hablar de la sanidad, un tema que según fuentes socialistas será el eje de sus próximos discursos en lo que queda de campaña.

"El principal enemigo del Sistema Nacional de Salud no son los virus, no son las enfermedades. El peor enemigo del Sistema Nacional de Salud son los recortes que se infligieron", ha denunciado, en alusión a las políticas que asegura que practica el PP donde gobierna.

Sánchez ha señalado que uno de los "pilares que más se debilitaron como consecuencia de la respuesta neoliberal" del PP a la crisis económica de 2008 fue la Atención Primaria.

Y ha aprovechado la ocasión para trasladar la "solidaridad" y el "compromiso" de su Gobierno con los profesionales sanitarios y "singularmente" con los de la Atención Primaria.

Además, ha destacado que cuando llegó al Ejecutivo, había "3.000 profesionales sanitarios menos que los que dejó Zapatero a Mariano Rajoy en el año 2011" y "hoy hay 90.000 profesionales sanitarios más gracias al compromiso de gobiernos como el de Ximo Puig y del Gobierno de España".

En su discurso, ha comentado que tres de las cuatro comunidades autónomas que menos gastan por habitante "están lideradas por el PP" y el primer puesto lo ocupa la Comunidad de Madrid, donde el 40 % de la población tiene un seguro privado.

"Eso no lo queremos para nuestro país", ha apuntado Sánchez, que ha defendido la necesidad de "garantizar con los impuestos" que todos los ciudadanos tengan "asegurada la respuesta sanitaria" en caso de enfermedad y ha criticado a la derecha por su "mantra" de "confundir responsabilidad fiscal con infierno fiscal".

Sánchez también ha contrastado la política sanitaria de España con la de Estados Unidos que, según ha dicho, en 2021 gastó un 16 % de su Producto Interior Bruto en sanidad mientras que nuestro país gastó el 8 % en 2021, por lo que afirma que "convertir el derecho de sanidad en una mercancía hasta incluso es menos eficiente".

Y ya en clave puramente electoral ha subrayado que no tiene "ninguna duda" de que el PSOE va a ganar el próximo 28 de mayo las elecciones en "la Comunitat, en al ciudad de Valencia, en Castellón, Alicante, en todos y cada uno de los pueblos y ciudades de esta comunidad y también en España".

"Volveremos a ser la primera fuerza política como lo fuimos en 2019", ha concluido.