En un giro inesperado dentro de la investigación que ha sacudido los cimientos políticos y empresariales de España, Koldo García, junto a otros tres implicados en el escándalo de corrupción que destapó el supuesto cobro de comisiones ilegales durante la crisis sanitaria, han sido puestos en libertad bajo medidas cautelares tras negarse a prestar declaración ante la Audiencia Nacional. Este hecho fue confirmado a THE OBJECTIVE por fuentes jurídicas.

La decisión, tomada por el juez tras la recomendación de la Fiscalía de no solicitar prisión preventiva, impone a los acusados comparecencias periódicas en el juzgado y la retirada del pasaporte, en un intento por asegurar su disponibilidad para futuras citaciones judiciales. Entre los liberados se encuentra el hermano de García, Víctor de Aldama, y el conocido empresario vasco Íñigo Rotaeche Lachiondo, mostrando la complejidad y el alcance de la red de corrupción investigada.

El caso, que explotó con la detención de 21 personas el pasado martes, incluido el hombre de confianza del exministro José Luis Ábalos, gira en torno a la adjudicación de contratos de emergencia durante la pandemia, específicamente para la compra de mascarillas. La Audiencia Nacional centra sus esfuerzos en desentrañar las "mordidas" en contratos que superan los 50 millones de euros, destinados a ministerios claves y comunidades autónomas, con García presuntamente en el corazón de las negociaciones.

El propio Ábalos, visiblemente "estupefacto" y "decepcionado" por los acontecimientos, se ha distanciado del escándalo, defendiendo su gestión al frente del Ministerio de Fomento, incluso cuando la Guardia Civil intensifica su búsqueda de pruebas, solicitando documentación y declaraciones a altos cargos relacionados con los contratos investigados.

Este caso no solo destapa un presunto entramado de corrupción en tiempos de crisis sino que también pone a prueba el sistema de justicia español, su capacidad para manejar casos de corrupción de alto perfil y la integridad de sus instituciones públicas. La comunidad espera ansiosa los próximos pasos en una investigación que promete más revelaciones.

Santos Cerdán insiste en que no tenían sospechas del exasesor de Ábalos

El secretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán, ha remarcado este jueves que desde el PSOE no tenían «ninguna sospecha» sobre el que fue asesor del exministro socialista José Luis Ábalos, Koldo García, quien ha sido detenido por un supuesto cobro de comisiones en contratos durante la pandemia de Covid-19, y ha pedido dejar trabajar a la Justicia.

«Estamos sorprendidos por la noticia», ha afirmado Cerdán ante los periodistas a su llegada al Congreso, incidiendo en que desde el PSOE van a dejar trabajar a la Justicia para poder «enterarse de todo». «Esta dirección siempre actúa con la corrupción cortando por lo sano», ha enfatizado.