En el transcurso del año 2023, Cataluña ha vuelto a liderar la pérdida de empresas en España, registrando un saldo negativo de 128, lo que acentuó este fenómeno en el último trimestre. Este declive empresarial se ha prolongado desde el procés de 2017, que desencadenó un éxodo sin precedentes.

Durante la crisis política e institucional de 2017, miles de empresas abandonaron Cataluña, incluyendo entidades simbólicas como CaixaBank, Banco Sabadell y Naturgy. Aunque la fuga empresarial disminuyó respecto a los años críticos de 2017 y 2018, la región no ha detenido por completo la pérdida de empresas.

La estrategia del gobierno de Pedro Sánchez para resolver este problema, mediante una ley de amnistía fiscal y un pacto con Junts para facilitar el retorno empresarial, generó desconfianza entre el tejido empresarial. Esto se tradujo en un aumento de la salida de empresas en el último trimestre de 2023, con 856 empresas abandonando Cataluña y 728 llegando de otras regiones, resultando en un saldo negativo de 128 empresas, la mayor pérdida en toda España.