El líder de Vox, Santiago Abascal, ha emitido un juicio contundente durante la presentación de los candidatos de su partido en Galicia. Abascal, conocido por su retórica firme, ha afirmado que el Partido Popular (PP) liderado por Alberto Núñez Feijóo y el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) encabezado por Pedro Sánchez son, en esencia, entidades políticas indistinguibles.

Abascal, quien se ha destacado por su posición firme en la defensa de la Constitución y el Estado de derecho, ha expresado su decepción al considerar que ambos partidos, a pesar de sus aparentes diferencias, comparten una base ideológica que contraviene los principios que, según él, deberían regir la política nacional. En sus propias palabras: "Hasta aquí hemos llegado. No se puede sacar a la gente a la calle a defender la Constitución y el Estado de derecho y luego llegar a un acuerdo para reformar esa misma Constitución con los que quieren dar el golpe".

En su discurso, Abascal ha dirigido fuertes críticas hacia Feijóo, acusándolo de abandonar sus responsabilidades en Galicia en busca de intereses personales en la Villa y Corte, en detrimento de los intereses nacionales. La relación entre Vox y el PP ha llegado a un punto álgido, según las declaraciones de Abascal, quien lamenta la falta de reconocimiento y gratitud por parte del PP hacia Vox, a pesar de la colaboración en la cogobernanza en varias regiones y el voto favorable en la investidura.

Además, Abascal ha delineado la postura de Vox en el Parlamento, justificando su rechazo a ciertas medidas gubernamentales como parte de una estrategia para contrarrestar, lo que él considera, un "golpe de Estado" liderado por el presidente Sánchez. Este enfoque de oposición sistemática se manifiesta en la negativa de Vox a respaldar la norma que modificó la Constitución para suprimir el término "disminuido".

En cuanto a la situación en Galicia, Abascal ha defendido la candidatura de Vox, destacando el crecimiento exponencial del partido en los últimos seis años. A pesar de las objeciones del PP, Abascal ha reafirmado la determinación de Vox de participar en las elecciones gallegas, calificando esta oportunidad como una manera de superar la "espinita clavada" de no haber penetrado aún en la política gallega.

En resumen, el discurso de Abascal ha dejado en evidencia la creciente tensión en la coalición de derechas, así como las diferencias fundamentales que, según él, existen entre Vox y otros partidos políticos en la escena nacional.