Cuerpo de la Noticia: En un giro significativo en el caso de los traslados laborales de la planta de Digitex en Camargo, el Tribunal Superior de Justicia de Cantabria (TSJC) ha ratificado la legalidad de la decisión de la empresa de reubicar a sus empleados en Barcelona y Jaén. Esta resolución confirma la sentencia previa del Juzgado de lo Social número 4 de Santander, la cual había sido impugnada por la Confederación General del Trabajo (CGT) de Cantabria.

El fallo del TSJC, que aún puede ser objeto de un recurso de casación ante el Tribunal Supremo, representa un revés para el sindicato CGT, que había argumentado falta de buena fe en la negociación y ausencia de causas objetivas para justificar el traslado. Además, el sindicato alegaba que la empresa había omitido información sobre la existencia de un grupo de empresas durante el periodo de consultas.

Sin embargo, el TSJC ha desestimado estos argumentos, subrayando que la negociación entre la empresa y los trabajadores "no se limitó a una mera comunicación escrita", sino que "se cumplió con el deber de negociar de buena fe". Asimismo, el tribunal señala que la empresa facilitó adecuadamente la información y la documentación necesaria durante el periodo de consultas.

La sentencia también aclara que no se demostró la existencia de un grupo de empresas de carácter laboral, ni que se hubiera ocultado este hecho durante las negociaciones. Además, se enfatiza que la continuación de las negociaciones, incluso tras el periodo inicial de consultas, es siempre preferible a las decisiones unilaterales.

En un aspecto positivo para los trabajadores afectados, el TSJC reconoce su derecho a extinguir su contrato con una indemnización de veinte días por año trabajado, en el plazo de 15 días desde la firmeza de esta sentencia.

Este dictamen del TSJC marca un momento crucial en el ámbito laboral de Cantabria, reafirmando la importancia del proceso de negociación y la validez de las decisiones empresariales cuando se cumplen los requisitos legales. La resolución no solo tiene implicaciones para los trabajadores de Digitex y el sindicato CGT, sino que también sienta un precedente relevante en la gestión de reubicaciones laborales en el contexto español.