El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, ha lamentado que no haya unanimidad en toda España al aplicar las normas contra la covid, cuando, a su juicio, no es un asunto político sino sanitario, y ha defendido que es "de pura lógica" que las medidas sean distintas en función de la incidencia del virus en cada comunidad autónoma.


El presidente se ha pronunciado así al ser preguntado sobre las comunidades que se niegan a adoptar las medidas frente al coronavirus aprobadas la semana pasada en el Consejo Interterritorial de Salud.

El jefe del Ejecutivo regional ha opinado que, aunque la unanimidad "es muy difícil", si se vota por una amplia mayoría las normas las deberían de seguir todas las regiones, y ha criticado que hay algunas posiciones que siempre están en contra del Gobierno de España.

"Yo le sugeriría que alguna vez (al Gobierno de España) que proponga algún disparate para ver si se ponen de acuerdo en ir a la contra y llegar a acuerdos", ha ironizado.

Revilla, además, ha defendido que "hay que aplicar los protocolos según la incidencia en cada comunidad" y que, según ha subrayado, "deben de marcarse en esos famosos semáforos".

"No se pueden tomar las mismas medidas en una comunidad que tiene una incidencia de 70 que en una que tiene 200. Esas comunidades tendrán que tomar algunas medidas adicionales a las que tomamos comunidades autónomas que tenemos, de momento, controlado el virus. Eso está así reglado y me parece de pura lógica", ha argumentado.

En cuanto a la capacidad que tiene el Gobierno de España para actuar frente a las comunidades que no quieren aplicar esos protocolos, el presidente cántabro ha recordado que el Ejecutivo central ha señalado que son de "obligado cumplimiento", por lo que estima que podrán recurrir a los tribunales.

"Si dicen que es de obligado cumplimiento es que habrá algún informe jurídico de altura que obligará a esas comunidades a que lo apliquen", ha apuntado Revilla.

Y ha recordado que los jueces están actuando de distinta manera dependiendo de cada región, por lo que ha insistido en que fue un "fallo" que "no se tuviese amarrado por una norma de ámbito superior, es decir el Supremo en este caso, que marcase la pauta del comportamiento de los tribunales de justicia de cada territorios".

El consejero de Sanidad, Miguel Rodríguez, ha señalado, por su parte, que "no hay ninguna duda" de que "una orden comunicada por la ministra" a todas las comunidades "es de obligado cumplimiento".

Según el consejero, "eso en cualquier Estado de Derecho es así". "Nosotros todo lo que sea que el acuerdo sea más mayoritario de lo que fue nos parece bien. Lógicamente, cuantas más comunidades apliquemos las mismas medidas, pues mucho mejor", ha considerado.