La Pirámide de los Italianos, un mausoleo construido en honor a los soldados italianos caídos en la batalla de Santander durante la Guerra Civil Española, ha sido oficialmente declarada Bien de Interés Cultural con categoría de Monumento por la Junta de Castilla y León. Este anuncio llega como un paso crucial para preservar esta estructura única, que se encuentra en la provincia de Burgos, cerca del límite con Cantabria, en el puerto del Escudo.

La historia de la Pirámide de los Italianos se remonta a su construcción en 1937, por orden de Francisco Franco. Diseñada por el arquitecto Attilio Radic y dirigida por Pietro Giovanni Bergaminio, fue inaugurada oficialmente el 26 de agosto de 1939 para albergar los restos de 384 soldados italianos del CTV (Corpo Truppe Volontarie).

A lo largo de los años, el mausoleo ha sido testigo de eventos trágicos, como el accidente en la curva de los italianos en 1971, que cobró la vida de 12 personas. Posteriormente, en 1975, el Gobierno italiano decidió exhumar los cuerpos, repatriando a 268 de ellos y trasladando el resto a la Iglesia de San Antonio de Padua de Zaragoza. Desde entonces, la Pirámide ha sido abandonada y ha sufrido deterioro y vandalismo, aunque antes de 2023 se retiraron sus antiguos símbolos políticos.

La declaración como Bien de Interés Cultural en 2024 marca un hito importante en la historia de la Pirámide de los Italianos, ya que impide definitivamente su demolición, que era la intención del Gobierno de Pedro Sánchez. La titularidad de la pirámide está en manos de la Asociación Hermandad de la Rivera de Herbosa, que ahora tendrá la responsabilidad de su conservación y protección.

Este reconocimiento no solo salvaguarda un monumento histórico invaluable, sino que también honra la memoria de aquellos que sacrificaron sus vidas en la batalla de Santander. La Pirámide de los Italianos continuará siendo un testimonio conmovedor de un período tumultuoso en la historia de España, y ahora, con su estatus protegido, seguirá inspirando a las generaciones futuras.