Diego Movellán, alcalde de Camargo, ha expresado su profundo desacuerdo con las declaraciones realizadas por el Ministro de Política Territorial y Memoria Democrática, Ángel Víctor Torres, en las que cuestionó abiertamente la decisión tomada por el Gobierno de Cantabria, liderado por el Partido Popular, de destinar las instalaciones del antiguo psiquiátrico de Parayas para la creación de un centro de asistencia a personas mayores en lugar de utilizarlo como un centro de acogida de refugiados, un proyecto que había sido proyectado previamente por el Gobierno de Pedro Sánchez y la exalcaldesa socialista Esther Bolado.

Las declaraciones de Torres, pronunciadas en una entrevista radiofónica, calificaron la elección de las instalaciones como un «error» y sugirieron que los alcaldes, incluido Movellán, tienen preferencias inapropiadas, dando a entender que los proyectos deseables para ellos se centran en instalaciones como centros deportivos, culturales y otras infraestructuras, en lugar de servicios necesarios como centros penitenciarios o instalaciones medioambientales destinadas a la gestión de residuos.

Movellán, en respuesta a estas palabras, ha pedido al Ministro Torres que evite equiparar a los inmigrantes con residuos y ha instado al Ministro a no incluir al municipio en una declaración que implique una equiparación entre la población inmigrante y la delincuencia. En sus palabras, ha enfatizado que el representante de Pedro Sánchez no tiene motivos para intervenir en Camargo y Cantabria de la misma manera que lo hace en Cataluña, y que su Gobierno no tiene autoridad para impartir lecciones de convivencia, dada su responsabilidad en la división entre los españoles.

Movellán también ha cuestionado si la reciente visita del Ministro, acompañado por el vicepresidente Pablo Zuloaga y la Delegada de Gobierno, tenía como objetivo evaluar la instalación de un centro de acogida de refugiados en Castro Urdiales, un municipio gobernado por el PSOE, que ha aceptado dicho proyecto. El alcalde de Camargo se ha mostrado escandalizado por las declaraciones del Ministro y ha sugerido que estas son más propias de una conversación informal en un bar que de un representante del Gobierno.

El primer edil de Camargo, Diego Movellán, ha pedido al Ministro de Política Territorial y Memoria Democrática, Ángel Víctor Torres, que respete las decisiones de los gobiernos locales y autonómicos en relación con la asignación de recursos y proyectos en sus territorios. En un comunicado oficial, Movellán expresó su desacuerdo con las declaraciones del Ministro y defendió la elección del antiguo psiquiátrico de Parayas como sede de un centro de asistencia a personas mayores.

Movellán calificó las palabras de Torres como «vergonzosas» y cuestionó su autoridad para intervenir en asuntos locales. Según el alcalde, el Ministro debería centrarse en su responsabilidad en el ámbito nacional y no interferir en decisiones tomadas por los gobiernos autonómicos y locales. Además, Movellán pidió al Ministro que se abstenga de equiparar a los inmigrantes con residuos y evite vincular a la población inmigrante con la delincuencia.

En la entrevista radiofónica que desencadenó esta controversia, el Ministro Torres había declarado: «Hay instalaciones que no son lo que más pueda querer un alcalde. Lo que quieren son centros deportivos, culturales, infraestructuras, mejoras,... pero los servicios son más cosas, y hay que tener puntos limpios hay, hay que tener centros penitenciarios o centros medioambientales para recoger los residuos». Estas palabras fueron interpretadas como una crítica a la elección del antiguo psiquiátrico para un centro de asistencia a personas mayores en lugar de un centro de acogida de refugiados.

Movellán consideró estas declaraciones como inapropiadas y sugirió que el Ministro no tiene un entendimiento adecuado de las necesidades de las comunidades locales. En su comunicado, el alcalde defendió la elección de utilizar el antiguo psiquiátrico para atender a personas mayores, argumentando que esta decisión se basó en las necesidades y prioridades de la población local.

Además, Movellán cuestionó la visita del Ministro, el vicepresidente Pablo Zuloaga y la Delegada de Gobierno a Castro Urdiales, un municipio gobernado por el PSOE que ha aceptado albergar un centro de acogida de refugiados. Movellán sugirió que esta visita tenía como objetivo evaluar la instalación de dicho centro en un municipio afín políticamente, y criticó la actitud entusiasta de la alcaldesa socialista de Castro Urdiales hacia el proyecto, en contraposición a la negativa de Camargo. En sus declaraciones, Movellán expresó su sorpresa y escándalo ante «unas declaraciones que más parecen de barra de bar que de un ministro», haciendo referencia a las palabras del Ministro Torres en las que sugirió que los alcaldes tienen preferencias inapropiadas en cuanto a proyectos y que los servicios esenciales, como los centros penitenciarios y las instalaciones para la gestión de residuos, son más relevantes.

El alcalde de Camargo también cuestionó la capacidad del Ministro para dar lecciones de convivencia, dada la situación política en Cataluña y la polarización en el ámbito nacional. Movellán sugirió que el Ministro no está en posición de impartir consejos sobre convivencia cuando el propio Gobierno central ha sido objeto de críticas por su gestión de la situación en Cataluña y su relación con otras comunidades autónomas.

En su comunicado, Movellán pidió respeto por la labor de los alcaldes y alcaldesas, así como de los gobiernos autonómicos, y recomendó al Ministro que «se vaya acostumbrando a aceptar las decisiones de los ciudadanos, porque en territorios en los que queda dignidad no va a poder cambiarlas todas ni regalando competencias ni hipotecando el cien por cien de los Presupuestos Generales del Estado».