La tenista española Paula Badosa ha sorprendido a sus seguidores al anunciar a través de sus historias de Instagram la finalización de su relación con el jugador griego Stefanos Tsitsipas. Esta pareja, que se había convertido en una de las más seguidas y comentadas en el mundo del tenis, pone fin a su romance después de un año juntos, dejando atrás momentos compartidos tanto en las canchas como fuera de ellas.

El anuncio de la ruptura, aunque inesperado para muchos, llega de manera amistosa según las palabras de Badosa: "Después de una gran consideración y de muchos momentos preciosos juntos, Stefanos y yo hemos decidido separar nuestros caminos de forma amistosa. Hemos compartido un camino lleno de amor y aprendizaje, y ahora, como amigos con gran respeto, decidimos seguir cada uno por su lado".

La relación entre Badosa y Tsitsipas comenzó a florecer en mayo de 2023, justo antes del inicio de Roland Garros. A pesar de una lesión que mantuvo a Badosa fuera de la competencia, la española estuvo presente en el torneo para apoyar a Tsitsipas desde las gradas, confirmando así el inicio de su relación.

Sin embargo, la separación llega justo antes del Mutua Madrid Open, dejando a ambos tenistas nuevamente como solteros en el circuito. Badosa, quien ha experimentado una caída en el ranking hasta el puesto 126 de la WTA, está decidida a recuperar el tiempo perdido. Para ello, ha vuelto a contar con su preparador físico, David Antona.

Tsitsipas tampoco ha estado exento de dificultades en su carrera, abandonando el top 10 el pasado mes de febrero por primera vez en cinco años. La última vez que se les vio juntos en público fue durante el Miami Open, después de lo cual siguieron caminos separados. Badosa no estuvo presente en Montecarlo ni en Barcelona, donde Tsitsipas disputó importantes encuentros, lo que sorprendió a muchos dado el carácter inseparable que habían mostrado hasta entonces.

La ruptura entre Badosa y Tsitsipas marca el fin de una relación que cautivó a los seguidores del tenis, quienes se acostumbraron a ver a la pareja compartiendo momentos tanto dentro como fuera de las canchas. Desde vuelos a diferentes ciudades para apoyarse mutuamente en torneos hasta disfrutar de comidas típicas españolas juntos, su relación había sido un punto focal en el mundo del deporte.

Ahora, ambos tenistas enfrentan nuevos desafíos en sus carreras profesionales mientras continúan sus caminos por separado. Aunque su romance llega a su fin, queda el recuerdo de una etapa en la que el tenis no solo estuvo marcado por los puntos en la cancha, sino también por el amor y la complicidad fuera de ella.