El principal implicado en el caso de pederastia descubierto por la Policía Nacional en Cataluña, Miquel N., quien está en prisión provisional por presuntos delitos de agresión sexual, ciberacoso sexual, corrupción de menores y pornografía infantil, acogió a niños saharauis de entre 10 y 12 años en su domicilio durante varios veranos. Según informaciones obtenidas por THE OBJECTIVE, Miquel N. estuvo inscrito al menos en 2017 y 2018 en el programa ‘Vacaciones en Paz’ de La Asociación de Amigos del Pueblo Saharaui.

En una entrevista concedida a un diario local en 2018, Miquel N. explicó que su interés por la acogida de niños saharauis venía de años atrás, cuando su familia ya participaba en el proyecto. En aquel verano, acogió a tres niños saharauis en su hogar, una experiencia que describió como muy enriquecedora.

La Policía, que mantiene la investigación abierta, trata de encontrar testimonios de otras posibles víctimas que aparecían en imágenes y vídeos encontrados en el domicilio de Miquel N. Por ahora, los agentes han identificado a nueve víctimas entre los archivos intervenidos al principal sospechoso, pero creen que la lista de víctimas podría ser mucho más extensa.

Miquel N. no actuaba solo en esta presunta red de pornografía infantil, sino que contaba con la colaboración de Ángel P., quien sería su pareja y con quien compartía vivienda en Argentona (Barcelona), donde presuntamente se llevaban a cabo las actividades delictivas. Ambos organizaban encuentros sexuales con menores en los que participaban, intentando ganarse la confianza de los niños para perpetrar los abusos.

La investigación comenzó en abril de 2023 por una denuncia de ciberacoso sexual de menores en una aplicación para gamers. La Policía Nacional logró localizar la vivienda del supuesto culpable en Argentona, donde encontraron numerosas pruebas incriminatorias, incluyendo conversaciones con la víctima denunciante y material pornográfico que implicaba a Miquel N. en relaciones sexuales no consentidas con menores.