En una maniobra de rescate que puso a prueba la pericia y el valor de los bomberos del 112 de Cantabria, un hombre ha sido rescatado ileso tras caer en una torca de ocho metros de profundidad en Solórzano. La estrechez de la cavidad jugó un papel crucial en mitigar la caída, evitando lesiones al afectado.

El Centro de Atención a Emergencias 112 del Gobierno de Cantabria fue alertado sobre el incidente alrededor de las 21:00 horas, desencadenando una rápida respuesta por parte de los bomberos especializados en rescate vertical. Estos profesionales no solo enfrentaron el desafío de la profundidad, sino también la dificultad añadida de la vegetación densa que cubría la entrada de la torca.

Con habilidad y eficiencia, los bomberos despejaron la maleza y establecieron un sistema de rescate para alcanzar al hombre atrapado. Uno de los rescatistas descendió a la oscura y estrecha torca, asegurando al hombre en un arnés antes de izarlo cuidadosamente hacia la superficie.

El hombre, cuyo nombre no ha sido divulgado, salió del incidente sin una sola herida, gracias a la rápida intervención y a la destreza técnica de los equipos de rescate, que lograron asegurar su bienestar a lo largo de toda la operación.

Este rescate destaca la importancia de la preparación y respuesta rápida en situaciones de emergencia, así como la valentía y el compromiso de los servicios de emergencia de Cantabria que, una vez más, demuestran su capacidad para manejar situaciones de alto riesgo con profesionalismo y cuidado.