29.04.2024 |
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EDUCACIÓN

¡Resistencia educativa! La escuela concertada y privada desafían la Ley Celaá

Con 9.400 centros y casi el 30% de la enseñanza no universitaria, atendiendo a más de 2.7 millones de alumnos, estos institutos se mantienen firmes
Varios estudiantes en un aula. / EP
Varios estudiantes en un aula. / AEF
¡Resistencia educativa! La escuela concertada y privada desafían la Ley Celaá

A pesar de los desafíos planteados por la controvertida ley educativa Celaá y la preocupante baja natalidad en España, la escuela concertada y privada muestra una sorprendente resistencia. Con un total de 9.400 centros que representan casi el 30% de la enseñanza no universitaria en el país, estos institutos atienden a 2.749.603 alumnos, abarcando desde la educación infantil hasta los programas formativos de niveles superiores.

El cerco de la Ley Celaá

La ley Celaá, también conocida como LOMLOE, generó inquietudes en el ámbito educativo al limitar ciertas libertades y derechos de los ciudadanos, según advirtió el modelo de educación concertada. Vox interpuso un recurso en 2021 ante el Tribunal Constitucional, argumentando que la ley afectaba directamente a la educación concertada, la enseñanza religiosa y los centros de educación especial. A pesar de este desafío, la mayoría progresista del Constitucional lo rechazó.

La ley Celaá derogó la LOMCE, eliminando el concepto de "demanda social" en la programación de la red de colegios, lo que, según críticos, afecta la pluralidad y libertad de elección por parte de las familias. Además, introdujo la idea de que las administraciones públicas deberían impulsar "un incremento progresivo de puestos escolares en la red de centros de titularidad pública".

La baja natalidad

La baja natalidad y la falta de financiación son desafíos cruciales para el sector, según la Federación de Sindicatos Independientes de Enseñanza (FSIE). La financiación insuficiente de los centros y las diferencias en las condiciones laborales respecto a la enseñanza pública son preocupaciones urgentes. La baja natalidad también se perfila como una amenaza, ya que obligará a muchos centros privados y concertados a cerrar unidades y reducir personal debido a la disminución de estudiantes.

A pesar de estos desafíos, la FSIE lanza una campaña de matriculación para el próximo curso, destacando la importancia de defender la libertad de elección de centro por parte de las familias, consagrada en el artículo 27 de la Constitución Española. La federación destaca que la escuela concertada y privada representa una apuesta de futuro para los alumnos, proporcionando una educación integral e innovadora adaptada a las exigencias actuales.

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