Alemania se enfrenta a un desafío climático con la llegada de fuertes nevadas y formación de placas de hielo. Más de 600 vuelos han sido cancelados en varios aeropuertos del país, y el transporte ferroviario se ha visto afectado. Las autoridades instan a la población a evitar desplazamientos innecesarios.

Cuerpo del Reportaje: Alemania se encuentra en medio de una ola de frío que ha desatado condiciones climáticas extremas en gran parte del país. Se espera que las nevadas continúen afectando principalmente el centro y sur de Alemania, llevando a las autoridades a emitir alertas de nivel muy alto por la formación de hielo.

En Berlín, la capital, se anticipan hasta 15 centímetros de nieve, con temperaturas descendiendo hasta los -8 grados Celsius. Sin embargo, las áreas más afectadas son el centro y sur del país, donde el Servicio Alemán de Meteorología (DWD) ha emitido alertas y recomendaciones para minimizar los desplazamientos.

El impacto en la aviación ha sido significativo. El aeropuerto de Fráncfort, uno de los más concurridos de Europa, ha cancelado más de 600 vuelos, afectando a aproximadamente 115.000 pasajeros. El aeropuerto de Múnich también ha visto una serie de cancelaciones, aunque en menor medida.

La aerolínea nacional Lufthansa y los operadores aeroportuarios han instado a los pasajeros a verificar el estado de sus vuelos antes de dirigirse a los aeropuertos y evitar traslados innecesarios. Se espera que las limitaciones de vuelo continúen durante el jueves.

En cuanto al transporte ferroviario, la Deutsche Bahn (DB) ha cancelado varios trenes de alta velocidad ICE que conectan ciudades alemanas con París, Francia. La DB ha advertido sobre posibles retrasos y cancelaciones adicionales en sus servicios regionales y de larga distancia, limitando la velocidad de los trenes a 200 km/h en todas sus rutas.

Las autoridades locales han tomado medidas para hacer frente a las condiciones climáticas adversas. En algunas ciudades cercanas a Fráncfort, como Rüsselsheim o Bergstraße, se ha ordenado el cierre de las escuelas y la implementación de clases a distancia. Adicionalmente, se ha emitido una alerta general a los ciudadanos en Fráncfort a través de dispositivos móviles, advirtiendo sobre las condiciones de nieve y hielo.

La policía en Fráncfort y Múnich ha pedido a través de las redes sociales que se eviten desplazamientos que no sean imprescindibles debido al alto riesgo de formación de placas de hielo. La situación ha llevado a los ciudadanos a enfrentar calles cubiertas de nieve y hielo, lo que dificulta significativamente el transporte y la movilidad.

La situación en Alemania refleja condiciones climáticas extremas similares en países vecinos como Bélgica y Luxemburgo, que también se encuentran en alerta por nevadas y hielo. En ambos países, las autoridades han aconsejado limitar al máximo los desplazamientos.

Este episodio de condiciones climáticas extremas en Alemania pone de relieve los desafíos que enfrenta Europa en términos de preparación y respuesta a eventos climáticos adversos. Mientras las autoridades y servicios de emergencia trabajan para minimizar el impacto, la población se ve obligada a adaptarse a un entorno rápidamente cambiante y potencialmente peligroso.