En un operativo marcado por la adversidad climática y la complejidad técnica, técnicos de Protección Civil y Emergencias del Gobierno de Cantabria lograron rescatar a dos montañeras, de 33 y 42 años y residentes en Bilbao, que quedaron aisladas en un refugio de montaña en Brañavieja debido a la copiosa nieve caída en las últimas horas.

Las montañeras, que se encontraban ilesas, habían iniciado su trayecto el domingo, optando por refugiarse ante las malas condiciones meteorológicas. La situación se complicó cuando la nieve, acumulada en espesores superiores al metro, bloqueó la puerta del refugio, dejándolas incomunicadas y en condiciones extremas.

La alerta al Centro de Atención a Emergencias 112 se dio a última hora de la tarde del lunes, y el rescate no se hizo esperar. Equipos especializados del Gobierno regional, enfrentando una ventisca y espacios de nieve que llegaban hasta la cintura, emprendieron a pie el camino hacia el refugio de Cirezos, una marcha que demandó aproximadamente dos horas debido a la necesidad de abrir paso a través de la densa capa de nieve.

Tras llegar al refugio y despejar la entrada, se verificó el buen estado de salud de las afectadas y se procedió a equiparlas con raquetas de nieve para su traslado seguro. Finalmente, ambas fueron guiadas hasta Riaño, poniendo fin a una experiencia que, si bien podría haber tenido un desenlace menos favorable, destacó por la eficacia y la coordinación de los servicios de rescate en condiciones extremadamente desafiantes.