La Copa Federación aleja hoy al Racing de Los Campos de Sport, el lugar donde se siente más cómodo y donde ha disputado sus dos últimos encuentros. En el primero de ellos eliminó al Arenas y se clasificó para jugar esta tarde los octavos de final en territorio asturiano, concretamente en Avilés. Será el penúltimo paso antes de alcanzar el objetivo primordial que quiere conseguir el conjunto cántabro en esta competición, que es clasificarse para la otra Copa, la del Rey, la que históricamente ha disputado. En teoría, el encuentro de esta tarde a partir de las ocho debería ser el más complicado de todos porque es a domicilio contra un equipo de Segunda RFEF. Si logra salir vivo, se jugará el pase definitivo en su propio terreno de juego y contra un equipo de Tercera RFEF, que en teoría debería ser más asequible que el contrincante de hoy. Lo bueno es que podría ser un derbi contra la Gimnástica. Suena bien.

El Racing necesita romper hoy su pobre dinámica como visitante y conseguir su primera victoria de la temporada lejos de los muros de protección que le ofrecen Los Campos de Sport. Si no es capaz de hacerlo, en el mejor de los casos se verá forzado a disputar una prórroga, algo muy poco recomendable en plena acumulación de compromisos, y en el peor se quedará apeado de la competición. Esto último supondría un golpe moral importante para un proyecto que, fundamentalmente, está viviendo de resultados. Necesita que éstos se mantengan para que el globo no se pinche.

El partido, como todos los de Copa Federación para un equipo como el Racing, tiene sus trampas. No se puede fiar. Jugar contra un equipo de inferior categoría carga sobre su espalda todas las obligaciones y responsabilidades. El rival no tiene nada que perder y jugará con esa desinhibición que ayuda a sacar lo mejor que uno tiene dentro. Para el Avilés será un gran día y para el conjunto cántabro un partido molesto antes de un encuentro muy esperado como el del próximo domingo en Badajoz. La teoría del partido a partido que repiten todos como mantra necesario es muy clara pero no es fácil apartar de la cabeza ese encuentro en tierras extremeñas dentro de la competición que de verdad da de comer a los equipos.

Que el Racing sea hoy el favorito también le debería obligar a dominar la contienda e intentar imponer su fútbol, pero el del conjunto cántabro es dar el balón al rival. Está por ver si el Avilés lo querrá o no. Lo que está claro es que hoy se medirán en suelo asturiano un Racing que no ha ganado fuera de casa y un Avilés que, directamente, no ha perdido todavía ningún partido esta temporada. Eso, por mucho que sea un equipo de inferior categoría, habla de solidez y de fiabilidad y anuncia complicaciones.

El cuarto. Actualmente, el equipo asturiano es cuarto en el grupo primero tras conseguir dos triunfos y tres empates en cinco partidos. A pesar de jugar en Segunda RFEF, tiene en sus filas jugadores veteranos y experimentados con trayectoria en categorías superiores a las que incluso está el Racing ahora. De hecho, en punta de ataque tienen a Natalio Lorenzo, aquel jugador que llegó a jugar en Primera División con el Almería y que también jugó varias temporadas en Segunda. Ahora tiene 37 años y aún está dando guerra. En sus filas también está Kilian Grant, de la cantera del Espanyol y que ascendió a Primera con el Huesca, el congoleño Cedric Mbwati, que jugó en la máxima categoría con el Betis o a Sergio García, que hizo lo propio con el Valladolid.

El Avilés ha llegado hasta aquí después de haber ganado al Langreo a domicilio hace siete días. La victoria avilesina libró al Racing, por lo menos, de tener que jugar en hierba artificial y hoy podrá jugar en un buen campo, con buenas dimensiones, césped natural y un graderío donde caben 5.400 espectadores que, por lo menos, ayudará a los jugadores verdiblancos a no olvidar que van a jugar un partido de fútbol exigente y ante un equipo que no se va a amilanar.

Es probable que Fernández Romo siga moviendo a sus hombres para seguir distribuyendo sus minutos. Hace siete días, tuvieron su oportunidad de inicio Marco Camus, Jorrín, Isma López, Fausto Tienza, Manu Justo y Bobadilla. Hoy podrían ser otros. O no. Unai Medina no podrá jugar por su lesión en el gemelo y está por ver si al menos hoy permite Fernández Romo a Ceballos jugar en su puesto. El santanderino es el último de la fila y seguir sin jugar hoy sería ya toda una invitación a empezar a llamar a puertas donde se le pueda abrir un futuro o, mejor dicho, un presente más esperanzador. A quienes sabe que no podrá dar descanso son a Íñigo, Pablo Torre y Cedric porque son futbolistas sin apenas recambio. El medio centro sí los tiene, pero el equipo nota su ausencia.

Se anuncia un partido largo y complicado que el espectador no podrá seguir por televisión, por lo que no tendrá el equipo encima la habitual presión sobre el juego que pone en práctica. Lo que necesita es traerse un buen resultado ante un equipo motivado que sabe bien de qué van estas historias. Para intentar explicar lo que sucedió hace siete días, cuando el Arenas no mereció perder contra el Racing, a quien acabó metiendo en su área obligándole a pedir la hora, Fernández Romo recordó que él, con el Cornellá, eliminó al Atlético de Madrid y cerca estuvo de hacer lo propio con el Barça. Por eso creía que había que entender el sufrimiento. Olvidó el detalle de que en esas eliminatorias que citó, se jugó en el campo del equipo pequeño, lo que hace más normal que el grande sufra. Sin embargo, el Racing jugó contra el equipo getxotarra en casa y con su gente. No hubo encerrona. Donde puede haberla es hoy. Eso será otra historia y se podrán entender muchas más cosas.

«A un partido, nadie te lo pone fácil»

El entrenador del Racing, Guillermo Fernández Romo, avisó de la dificultad que tiene la eliminatoria de esta tarde porque, como recordó, «cuando te juegas todo a un partido nadie te lo pone fácil». «Lo vimos ante el Arenas.

Todos los equipos, por ser quienes somos, van al máximo y ellos, jugando como locales y ante el Racing, siempre van a tener ese plus extra que nos va a obligar a estar al 100%. Pero no vamos a hablar de excusas ni justificaciones, hablemos de juego, de fútbol y de hacerlo lo mejor posible para continuar adelante», explicó.

El técnico verdiblanco reveló que sus hombres llegan a la cita del torneo del KO con «una carga emocional que forma parte de cada partido, pero activados y metidos en la competición».

«Es una competición diferente, se juega a un partido y de visitante ante un buen rival. A nivel físico, tenemos una plantilla larga, van a estar jugadores del filial que por méritos propios se incorporan con nosotros, y trataremos de presentar la mejor alineación posible y tener luego las mejores soluciones para afrontar el partido», explicó. Sostuvo Fernández Romo que el Avilés «es un equipo difícil, lleno de buenos jugadores con experiencia en categoría superior». Recordó que el club ha hecho este año «una buena inversión con la idea de ascender y estar lo más arriba posible».

«En liga, de hecho, no ha perdido ningún encuentro y en la Copa superó con mérito al Langreo. Los vimos en Navalcarnero, hay que ver cómo salen, porque han manejado diferentes estructuras a la hora de jugar, así que debemos estar pendientes, ser proactivos en lo que queremos hacer y entrar al choque lo mejor posible». El entrenador racinguista, finalmente, confirmó que Unai Medina «no estará por descanso», ya que explicó que a los jugadores que tienen molestias quieren «cuidarlos para evitar que puedan perderse más encuentros si surge una lesión más importante». Quien podría tener su oportunidad es Jack Harper pero no Sergio Marcos, que sigue de baja.