José Alberto está enfado con los árbitros. “No es normal que el Racing lleve ya doce expulsiones y que sea el equipo más perjudicado por el VAR”, afirmó en la mañana de ayer, cuando recordó que su equipo había hecho sólo “cuatro faltas en Zaragoza y vio dos rojas”. Por eso volvió a pedir “respeto” recordando que el equipo al que entrena “no es un equipo agresivo que haga 25 faltas por partido o que pare continuamente el juego de los rivales”. No es de esos, por lo que hay algo que se le escapa. Tanto es así, que se mostró rotundo al considerar que “si los arbitrajes hubieran sido normales, el Racing estaría salvado ya”. Ahí es nada. 

De todas maneras, entiende el entrenador verdiblanco que “las cosas pasan por algo”, por lo que ha dedicado la semana a intentar “sacar conclusiones” de lo que sucedió en Zaragoza. Fue uno de los días en los que “más orgulloso” se sintió del equipo pero quiso aprovecharlo para “buscar procesos de mejora y aprendizaje” que poder utilizar, por ejemplo, mañana para enfrentarse a toda una potencia como el Granada. El mismo José Alberto lo define como un “excelente equipo que va segundo por algo”. Nadie regala una clasificación así a falta de sólo seis jornadas. 

El técnico asturiano considera incluso que el conjunto nazarí cuenta con “la mejor plantilla de la categoría”, ya que tiene “a dos jugadores por puesto que serían titulares en cualquier equipo de Segunda”. Habla, por tanto, de un rival de “muchísima calidad” y precisamente por eso “está peleando el ascenso directo”. Con todo, advirtió de que tanto él como sus jugadores siempre miran más hacia ellos mismos que hacia el rival. Lo que saben es que éste les va a demandar “la excelencia” para ganarles. “Tendremos que hacer un partido prácticamente perfecto, intenso, donde cada uno tenga las cosas claras”, añadió. Sabe que el último duelo en casa contra el Albacete puede servir como guía “porque fue perfecto”, pero también avisa de que cada compromiso tiene “condicionantes diferentes”.

Hay un hándicap que está impidiendo que ese cohete llamado Granada esté ya en las estrellas, que es su escaso rendimiento a domicilio. En casa es intratable pero fuera es vulnerable. “Es difícil explicar situaciones así”, aclaró José Alberto. De hecho, recordó que a él mismo le pasó la temporada pasada en Málaga, donde en noviembre eran “el mejor local de Europa” y a domicilio no ganaban “a nadie”. Detalles así demuestran, en su opinión, que “ganar como visitante en esta categoría es muy difícil”. Lo bueno es que de las seis jornadas que quedan, el Racing ha de jugar cuatro en su campo.

Eso sí, todo lo que queda por delante anuncia dificultades porque, a estas alturas, “todos los partidos son muy cerrados y muy difíciles”. En concreto, el Granada cuenta con “un potencial ofensivo tremendo” mientras que, a su vez, “ha mejorado mucho a nivel defensivo en las últimas jornadas”. Es cierto que viene de sumar dos derrotas en sus dos últimas salidas pero, en su opinión, fueron partidos en los que estuvo “más cerca de ganar o de empatar que de perder, pero el fútbol tiene estas cosas difíciles de explicar”.

Es precisamente mirando los calendarios como a muchos racinguistas les ha entrado un repentino temor a terminar el curso en el pozo. Sin embargo, José Alberto, como han ido haciendo sus jugadores durante la semana, insiste en vender optimismo. “Tengo la certeza de que el Racing se va a salvar”, llegó a decir ayer. Por eso quiere “a la gente centrada en nuestro partido” y no en otros resultados. “Nos da igual porque dependemos de nosotros mismos y por eso tenemos que dar lo mejor de nosotros”, subrayó. Por eso pidió que la afición acuda al estado a “animar y dejarlo todo”, que no se preocupe y que sí se ocupe de sus futbolistas porque “cualquier rival se cambiaría” ahora mismo por el Racing.

Las bajas por sanción o lesión van a volver a ser muchas y de ahí que vaya a haber novedades a la fuerza. Una de ellas puede ser la entrada de Pol Moreno en el once por el lesionado Rubén Alves. Formaría, por lo tanto, pareja con Germán. Y es una pareja que en las otras tres ocasiones que ha sido titular, el equipo ha perdido: Granada, Tenerife y Burgos. Nunca han jugado juntos en El Sardinero. No confirmó José Alberto que vaya a apostar por ellos dos pero sí lo dio a entender. “Tengo el equipo claro desde hace días y por eso no tengo ninguna duda de los jugadores que voy a sacar. Y creo que voy a sacar a los mejores que tengo disponibles porque son los que en mejor estado de forma y de ánimo están”, apuntó.

Recordó el técnico, en este sentido, que Pol Moreno “es un jugador de la categoría preparado y capacitado” y que el cuerpo técnico está “tranquilo”. “Manejamos a Eneko (Satrústegui) y Manti (Mantilla) como alternativas diferentes, pero el equipo está claro”, insistió. Lo dicho: pocas dudas sobre quiénes se van a encargar del centro de la retaguardia. Serán los mismos que lo hicieron en el partido de la primera vuelta. 

De lo que se felicita José Alberto es de que su equipo tenga un “gran compromiso”, de que está “entrenando impresionante” y de que “está compitiendo”. Todo ello le permite “tener claro” que va a volver a su “mejor nivel” en las últimas seis jornadas que restan hasta el final. Y es que, “todos están apretando y poniendo las cosas difíciles”, como ha hecho Peque, que poco a poco va asomando. En su día reconoció el técnico que estaba siendo “injusto con él” al no darle los minutos que merecía pero en Zaragoza ya tuvo 45 que fueron “muy buenos a nivel ofensivo, lo que era difícil porque no había nadie por delante, pero también a nivel defensivo”. Eso es, en definitiva, lo que pide todo entrenador.