No se confirmó hasta última hora de la tarde de ayer, pero en el Racing lo daban por hecho desde la mañana. No habrá partido este fin de semana. Otra vez. En esta ocasión, fue el equipo rival quien solicitó el aplazamiento de la contienda y, a partir del precedente que marcó el propio Juez Único de Competición el pasado fin de semana con el encuentro que debía haberse celebrado en Riazor, no había duda de que iba a aceptar la petición de la Cultural Leonesa, que es el equipo que debía visitar mañana Los Campos de Sport. Finalmente, no lo hará. Habrá que buscar otra fecha, por lo que al encuentro pendiente contra el Deportivo habrá que sumar otro miércoles más de competición.

Según el auto del Juez Único de Competición, en la Cultural han detectado cuatro casos positivos, que son dos más de los que encontró el Racing hace siete días. Sólo con esa comparación numérica, era imposible que al club castellano le negaran el aplazamiento. Además, los servicios médicos del equipo leonés también acreditaron que había otro jugador más que, aunque no dio positivo en las pruebas realizadas, sí mantiene síntomas. Ante esta realidad, quienes mañana debían jugar en Santander recordaron que meter a toda la expedición en un autobús para el desplazamiento suponía un peligro por los posibles contagios que se podían producir. En definitiva, el caso era calcado al del Racing la semana pasada, por lo que no había más leña que cortar. A buscar otra fecha.

Se ha metido en un lío la Federación al haber aceptado aplazar el encuentro de Riazor del pasado domingo por dos casos porque se ha escrito un precedente que provocará que en seguida se cambien de fecha los partidos, lo que va a generar una realidad diferente a la vivida en la primera vuelta, cuando la incidencia tampoco estaba tan disparada. Por ahora, el Racing ya tiene dos fechas pendientes. Finalmente, quien debía haber sido su rival el pasado domingo, el Deportivo, sólo tendrá uno porque sí tendrá partido, algo que temía que no fuera a suceder por la acumulación de positivos en el Real Unión, que es su rival. Al final, han acordado retrasar el encuentro del sábado al domingo para dar un día más a los guipuzcoanos y ambos jugarán a las cinco de la tarde.

Lo que hizo ayer el Juez Único de Competición, que se llama Rafael Alonso, fue ahorrarse el llamamiento a confinar a la plantilla afectada, tal y como hizo con el Racing. Es algo que extralimita sus competencias porque eso sólo lo puede decretar la autoridad competente, que en Cantabria sería el departamento de Salud del Gobierno autonómico. Por eso el Racing no lo cumplió a rajatabla, sino que lo que hizo fue entrenar por grupos pequeños y con trabajos individualizados. Es eso, precisamente, lo que le ha ordenado hacer el juez a la Cultural. En concreto, les conminó a «abstenerse de realizar entrenamientos colectivos mientras dure el periodo de contagio, según indicación de los servicios médicos de la Federación Española».

Durante el entrenamiento del Racing ayer ya intuían los jugadores y técnicos que se iban a pasar otro fin de semana sin jugar. Será el segundo consecutivo, lo que da lugar a una situación que ni mucho menos resulta idónea para sacar de un grupo el mayor nivel competitivo. De hecho, desde que el conjunto cántabro jugara el pasado 18 de diciembre en Almendralejo contra el Extremadura, el equipo verdiblanco sólo ha disputado tres partidos. En la práctica, son los únicos que va a disputar en prácticamente dos meses, lo cual siempre es un problema porque, además, el conjunto cántabro pasará de prácticamente no vestirse de corto, a comenzar a acumular jornadas pendientes. El Juez Único de Competición siempre solicita jugar en la fecha «lo más cercana en el tiempo» posible, por lo que es muy probable que los partidos pendientes ante Deportivo y Cultural se disputen en dos miércoles consecutivos. Se puede presentar el Racing, por lo tanto, con cinco partidos en quince días.

La parte positiva de la decisión tomada ayer por el juez de competición es que Fernández Romo podrá recuperar jugadores. Es incluso probable que llegue Unai Medina, que ayer, al menos, comenzó a correr en los campos de las instalaciones Nando Yosu. Marco Camus ya se muestra totalmente recuperado y quien no podría haber jugado mañana es Íñigo, ya que aún están renqueante por haber pasado un Covid más complicado de lo esperado. Ahora tendrá tiempo para ponerse a punto. En principio, el próximo objetivo pasa a ser el Badajoz.

El primer encuentro que ha de encontrar nueva fecha es el que hay que disputar contra el Deportivo en La Coruña. La fecha que manejan ambos clubes es la del próximo día 16. El problema que están encontrando es el horario, ya que el club local quiere que el encuentro se dispute tarde, a las 21 horas, para que pueda acudir a la grada el mayor número de aficionados posible una vez que hayan terminado con sus obligaciones laborales. Sin embargo, el Racing pretende que sea antes, a las 19 horas, para después llegar antes a Santander teniendo en cuenta que sólo un par de días después del viaje de vuelta de La Coruña les tocaría jugar contra Unionistas en Salamanca. Al final, es probable que sea la Federación la que fije el horario definitivo. Todo ello, a la espera de que no sigan saliendo más positivos porque, como ha quedado acreditado estos días, a pocos que surjan, el aplazamiento se da por seguro.