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El Diario de Cantabria

«Estamos preparados para aguantar la presión»

Fernández Romo asegura que han recibido con naturalidad el liderato y que van a intentar «seguir afrontando igual» los partidos

Guillermo Fernández Romo, dando indicaciones a sus hombres en La Albericia. / Hardy
Guillermo Fernández Romo, dando indicaciones a sus hombres en La Albericia. / Hardy
«Estamos preparados para aguantar la presión»

No hay duda de que el Racing está en el mejor momento de la temporada. Lo reconoce hasta su entrenador, que tampoco es amigo de dar titulares gratuitos. No le queda tampoco otro remedio recordando «el tiempo sin perder que lleva el equipo, los rivales a los que ha ganado, los campos donde lo ha hecho y las sensaciones que ha transmitido». Es incuestionable. De hecho, el equipo verdiblanco va a partir hoy hacia Talavera después de haber firmado una gran actuación en su última aparición, que fue la del domingo pasado contra el Real Unión.

Precisamente por lo bien que van las cosas, hay miedo a sufrir un despertar repentino e inesperado. Se llama paparda en el argot racinguista. El equipo ha acostumbrado a su gente a ellas en los últimos tiempos, por lo que no hay nadie cerca de ponerse a descorchar champán antes de tiempo. Tampoco lo hace el equipo porque, para empezar, ni mucho menos considera que se va a encontrar con un rival menor mañana. No tiene el nombre y, sobre todo, no está en la clasificación donde están Deportivo, Unionistas o Real Unión, pero advierte Fernández Romo de que están preparando el partido «igual que todos los demás porque no puede cambiar nada por ir ahora líderes». «Tenemos que ir a hacer lo mismo con muchísimo respeto y ambición y a hacer el mejor partido posible», añadió el técnico verdiblanco tras el entrenamiento de ayer.

Dejó claro Fernández Romo que el equipo no se da por satisfecho y va a mantener «la ambición por hacer las cosas bien y cada vez mejor». Por el hecho de ser líderes, no van a dejar de ir «con respeto o ambición» porque, además, considera que el Talavera es un gran equipo. «De él me gusta la portería, los jugadores que tiene, me gusta Sousa, Miño, los medio centros, Romero, Ceberio, Añón, Pichín... Me gusta también el entrenador», enumeró Fernández Romo, que recordó que conoce bien el campo del equipo manchego porque ha sido asiduo a él. «Me he criado allí», destacó.

Lo que es indudable es que el Talavera está en problemas. Y a estas alturas del campeonato, eso quiere decir que han sufrido «regularidades» que no han sido positivas para ellos. «Les han pasado cosas malas pero no han hecho cosas malas», precisó el entrenador del Racing. De hecho, considera que, sobre todo en su propio campo, han sufrido accidentes debido a «dinámicas negativas» y han perdido partidos que no debían haber perdido.

Será la primera vez que el conjunto cántabro defienda el liderato. Es una presión añadida pero no cree Fernández Romo que vaya a condicionar a los suyos porque quien viste la camiseta del Racing ha de venir presionado de casa. Él la siente desde el primer día. «Desde el primer momento sabía dónde venía y que aquí está institucionalizado ser críticos y dar caña al entrenador sea quien sea porque es la manera de hacer», explicó el madrileño. En ese sentido, destacó que simplemente se ha centrado en trabajar sin valorar «nunca si hemos tenido más o menos dinero» u otras cuestiones. Sólo ha pensando en «ganar los máximos partidos posibles y llegar al objetivo planteado». «¿Que lo hacemos de manera maravillosa y ganando mucho, pues cojonudo, pero nosotros no vamos a cambiar ese sentido y todos estamos preparados para aguantar la presión e intentar seguir ganando», explicó.

Decisiones. Le preguntaron al entrenador del Racing «qué prioriza» a la hora de elegir un compañero para Íñigo en el centro del campo, ya que el capitán parece ser el fijo en esa sala de máquinas. Y no supo bien cómo responder porque «es todo, incluso las sensaciones». «Si entendiera el fútbol de manera muy individual, no daría tanta importancia a las complementariedades, pero como lo entiendo como un colectivo, está en función de quiénes son ellos, de que los de arriba reciban más balones, de nosotros mismos, del rival, del estado de forma, del momento de cada uno, de como queremos que la pelota pueda salir o cómo imaginamos que pueda entrar....», afirmó.

Otra pregunta tuvo que ver con Bobadilla y Pol Moreno y en función de qué elige quién juega por la izquierda y quién por la derecha. Y también hay muchas variables, como «quiénes son los laterales, el perfil de ellos y también de los medio centros o el perfil del atacante». Lo bueno es que, en su opinión, tiene «la gran suerte» de que cualquiera de los dos se puede asentar en el costado izquierdo del centro de la defensa sin que ninguno de los dos sea zurdo. Por encima de todo, destacó la «confianza» que le dan y, sobre todo, la «fiabilidad que tienen ambos».

Lo que descartó Fernández Romo es que la irrupción de Arturo en el equipo haya devorado a Marco Camus y al gran momento de forma que venía exhibiendo. Entiende que son jugadores diferentes porque el recién llegado «da otras cosas» que no dan «los aceleradores» y al revés. Recordó que participó en el gol de Riazor «cruzando el campo» y en el que anotó Pablo Torre en Salamanca. Lo que le parece «genial» es tener «perfiles diferentes». A lo que animó el técnico madrileño es a seguir «trabajando muy duro» para que luego sea el cuerpo técnico quien tome las decisiones. Considera que la aportación de Arturo está siendo positiva porque «es un buen jugador, es un chico que sabe jugar, que es algo importantísimo, y también es un tipo extraordinario que cae genial en el vestuario».

Prevé más férreos marcajes a Pablo Torre

No tiene miedo Guillermo Fernández Romo a que Pablo Torre se despiste después de haber aparecido esta semana en un buen número de portadas de periódicos madrileños. «No hablo con él de las cosas externas», apuntó, en primer término, el técnico verdiblanco. «Sólo de lo interno», precisó. De hecho, afirmó que ayer mismo, cuando ya saltó a la luz su fichaje por el Fútbol Club Barcelona, había estado centrado en «hablar con él de situaciones de juego para mejorar». La rutina no ha cambiado y han seguido centrados en el partido del domingo. Sí intuye que a partir de ahora puede sufrir marcajes más duros porque es obvio que «el río mediático existe». «Cuando hay más ruido mediático también hay más conocimiento. Sin él, quizá habría más gente que no sabría quién es, cómo juega o cuáles son todas sus capacidades». Ahora todo el mundo tiene ya apuntada su matrícula. Lo que ha descartado es que él vaya a osar a aconsejarle nada sobre su futuro porque dijo no tener «ese carácter ni esa osadía». De hecho, volvió a destacar la «personalidad» y la «madurez» que desde el primer día ha mostrado Pablo Torre. «Tiene un entorno que conoce la profesión y está bien asesorado», destacó. Y recordó que, aunque en los últimos días se haya incrementado «el ruido» en torno al jugador, en verdad lleva «conviviendo con él ocho meses y defendiendo lo que es él». De este modo, ayer mismo se centró en ponerle el vídeo del Talavera para centrarse en «las cosas que hay que mejorar este domingo». Como si no hubiera pasado nada. Sigan, sigan.

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