La Asociación de Peñas Racinguistas (APR) y La Gradona emitieron ayer un duro comunicado contra los dirigentes verdiblancos que recordó a otros tiempos de ruido y furia. Tanto es así, que anunciaron la «paralización de cualquier colaboración» con el club para elaborar los festejos y celebraciones del 110 aniversario que se celebrará el próximo año, lo que recordaría, directamente a lo que sucedió con los actos del Centenario en los tiempos de Harry.

Las peñas culparon al «máximo accionista» del «desánimo» generalizado que, en su opinión, atraviesa el racinguismo, lo que se evidenciaría por el lento ritmo de venta de abonos. Hasta el fin de semana pasado, eran poco más de mil los seguidores que habían renovado el abono, por lo que consideran que se habría frenado «de manera fulminante» el ímpetu generado por el ascenso.

Según afirman, Alfredo Pérez «ni quiere ni pone ganas para escuchar a los que avisaban del error cometido en la campaña de abonados». Le critican por responderles con «silencios, evasivas y confusas respuestas» a su petición de celebrar una reunión al respecto, por lo que tienen claro que los máximos accionistas «no quieren estrechar lazos con las asociaciones racinguistas». Por eso consideran «una gran mentira» ese eslogan de campaña que dice ‘Juntos somos imparables’. «Y la culpa no es de la afición racinguista, sino del grupo PITMA», puntualizan.

No entienden tampoco los peñistas que se haya tratado como un «hito histórico» la firma del convenio con el Ayuntamiento porque, con él, «simple y llanamente se limitan a cumplir la ley» al cumplir con la ley de accesibilidad y al programar la realización de «aquellas inversiones que el estadio necesita desde hace décadas».

Con todo, lo que más les indigna es lo referente al uso de los bajos de El Sardinero, que, según explicó la alcaldesa la semana pasada, se llevará a cabo bajo gestión municipal. «El acuerdo apunta a una nueva traición que se le hace a la deuda histórica que Santander tiene con el Racing, ya que se vuelve a despatrimonializar el club», avisan. «Evidentemente, estamos a favor de que ambas partes puedan coordinarse, repartirse tareas e inversiones, pero nunca apoyaremos que el club renuncie a sus derechos», añaden a la vez que reclaman a Alfredo Pérez que reflexione y se reúna con ellos «para cimentar el futuro de forma conjunta y constructiva».