La presidenta del Partido Popular, María José Sáenz de Buruaga, ha reclamado hoy una bajada generalizada del IRPF a todos los cántabros para contrarrestar los efectos de una inflación desbocada, frente a las medidas cosméticas y de escaso impacto sobre la economía familiar, los trabajadores y las empresas anunciadas por el Gobierno PRC-PSOE.

"Nuestro Gobierno regional llega tarde y mal a todos los problemas y no soluciona ninguno", ha opinado Sáenz de Buruaga, en una rueda de prensa, en la que ha tachado de "cosméticas" las medidas anunciadas de eliminación de algunas tasas y de aumento en un 10 por ciento en el mínimo exento personal y familiar en el IRPF, con una rebaja media por contribuyente de 154 euros que se hará efectivo el año próximo, que ve "razonable", pero "totalmente insuficiente". "Es ahora y no en 2023 cuando hay que contrarrestar los efectos de la inflación", ha apostillado.

Y ha reprochado al Ejecutivo que esas medidas suman 30 millones de euros, cuando el año pasado tuvo un superávit de 128 millones y solo en los tres primeros meses del año ha obtenido en una recaudación fiscal superior a esa cantidad por el aumento de los precios.

Sáenz de Buruaga ha subrayado que eso es "inaceptable" y ha reclamado al presidente cántabro, Miguel Ángel Revilla, que "apoye" las medidas propuestas por el nuevo líder nacional del PP, Alberto Núñez Feijóo, de una bajada inmediata del IRPF para compensar la inflación y reducir de forma inmediata ya las retenciones en las nóminas y que presione al presidente Pedro Sánchez para que baje los impuestos.

"Revilla ha respaldado el plan de Pedro Sánchez porque siempre que tiene que elegir entre los cántabros y Pedro Sánchez, elige a Pedro Sánchez. Elige la ruina para Cantabria mientras sea lo más cómodo para él", le ha reprochado, y le ha demandado "alguna medida propia, real y efectiva" .

Sáenz de Buruaga ha denunciado la "voracidad recaudatoria" del Gobierno de Cantabria y ha incidido en la necesidad de aplicar medidas "más ambiciosas", por lo que ha abundado en la propuesta que el PP lleva defendiendo toda la legislatura de una bajada del IRPF en todos los tramos autonómicos del impuesto para los 285.000 contribuyentes de la región, dirigida especialmente a las rentas bajas y a la clases medias.

En esencia, la propuesta, según ha recordado, contempla una bajada del IRPF un punto en todos los tramos, situando el tipo mínimo en un 8.5 por ciento, el más bajo de España junto con la Comunidad de Madrid, y el máximo en el 47 por ciento frente al 50 por ciento actual, que es el "más alto de España", ha denunciado.

"En este momento no necesitamos una Administración más rica, sino una sociedad más próspera", ha argumentado la presidente del PP cántabro, quien ha valorado como una "buenísima noticia" que el Gobierno regional "empezase a rectificar" para "abrir el terreno a un pacto" con su partido, aunque ha precisado que tiene "pocas esperanzas". EFE

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