El principal líder de la oposición en Grecia, Alexis Tsipras, ha renunciado este martes a intentar formar Gobierno tras el intento fallido del primer ministro, Kyriakos Mitsotakis, por lo que sólo resta que la presidenta, Katerina Sakellaropoulou, efectúe un tercer contacto para que el país se vea abocado de nuevo a las urnas, previsiblemente a finales de junio.

La Constitución establece que Sakellaropoulou debe encargar la formación de Gobierno a los tres partidos más votados en las elecciones del domingo, en las que la Nueva Democracia de Mitsotakis se impuso con claridad al obtener más del 40 por ciento de los votos. Aunque se acercó a la mayoría absoluta, ha renunciado a buscar posibles pactos con otros partidos.

Tsipras, a quien le correspondía este martes el turno, ha reconocido que SYRIZA tampoco tiene margen, por lo que directamente a rechazado el mandato. El ex primer ministro ha reconocido que los resultados del domingo fueron "un doloroso golpe", aunque ya el lunes dejó claro que seguiría la "lucha" para intentar conseguir una mayoría de izquierdas en los próximos comicios.

Tsipras ha advertido del riesgo de que haya un primer ministro "todopoderoso" tras la cita de junio, habida cuenta de que se aplicará un nuevo sistema electoral que recupera la prima de escaños para el partido más votado, previsiblemente Nueva Democracia. Mitsotakis aspira a que, con este extra, supere el umbral de la mayoría absoluta.

Por su parte, Sakellaropoulou espera que de las próximas elecciones salga finalmente un Gobierno, si bien por ahora ha dejado claro que se limitará a cumplir los procedimientos contemplados en la Constitución, que pasan ahora por citar al líder del Movimiento Socialista Panhelénico (PASOK), Nikos Androulakis, en calidad de tercer partido más votado.