En un evento de cierre de campaña en Tui (Pontevedra), el expresidente del Gobierno, Mariano Rajoy, expresó su preocupación ante la posibilidad de un Gobierno de coalición izquierdista en Galicia, calificándolo como un escenario "inestable y conflictivo". Durante su intervención, Rajoy señaló la complejidad que podría surgir con una alianza de tres o cuatro partidos, describiendo esta configuración como un "Gobierno Frankenstein" que podría desencadenar inestabilidad política en la región.

El diputado gallego Moisés Rodríguez Pérez también abordó el tema postelectoral, planteando la opción de un Gobierno liderado por el Partido Popular (PP) o, en su extremo opuesto, el surgimiento del "caos más absoluto". No obstante, Rajoy descartó de manera enfática la posibilidad de este último escenario, manifestando su confianza en que el PP logrará la deseada mayoría absoluta en las elecciones del próximo domingo 18 de febrero.

El evento, que congregó a aproximadamente 300 simpatizantes en la localidad de Baixo Miño, contó con la presencia destacada de la secretaria general del PPdeG, Paula Prado, y el presidente del PP de Pontevedra, Luis López, entre otros perfiles del partido.

En su discurso, Rajoy no escatimó críticas al Partido Socialista Obrero Español (PSOE) liderado por Pedro Sánchez, al que acusó de haber "perdido el juicio", cuestionando no solo su capacidad para gobernar sino también la estrategia de campaña centrada en la candidatura de Ana Pontón para presidir la Xunta.

El expresidente también arremetió contra el Bloque Nacionalista Galego (BNG), al considerar que, a pesar de presentarse como moderados, participa en coaliciones electorales con Bildu, al que identificó como el "brazo político de ETA", y Esquerra Republicana de Catalunya (ERC).

Rajoy hizo hincapié en la importancia de obtener una mayoría absoluta, recordando el caso de Manuel Fraga Iribarne, quien, con 37 diputados, no pudo formar gobierno. En este sentido, instó a la ciudadanía a ejercer su derecho al voto y a movilizar a familiares y amigos para participar en el proceso electoral, subrayando que "nos jugamos el futuro de Galicia".

El inicio del acto estuvo a cargo de Moisés Rodríguez Pérez, quien resaltó la proximidad de la primera mayoría absoluta de Alfonso Rueda, proyectando un "triunfo histórico" del PP para continuar liderando Galicia. Rodríguez Pérez hizo un llamado a la determinación, afirmando que la elección es "todo o nada", enfatizando que la estabilidad de Galicia está en juego.

Posteriormente, Luis López, presidente del PP de Pontevedra y de la Diputación, expresó su agradecimiento al partido y destacó la eficacia de los 'populares' en el funcionamiento de Galicia. Aprovechó la ocasión para elogiar la figura de Mariano Rajoy y su contribución a la campaña.

En el ámbito de género, Paula Prado reivindicó a Rajoy como "el mejor presidente de España" y afirmó que al PP "no se le puede dar lecciones de feminismo", destacando la presencia de mujeres alcaldesas en Galicia. Prado criticó la presencia de ministros del PSOE en la campaña, lamentando la continuidad de Fernando Grande-Marlaska en su cargo a pesar de los sucesos ocurridos en Barbate.

Concluyendo su intervención, Prado enfatizó la dependencia exclusiva de los votos del PP y llamó a votar por el partido en las elecciones del 18 de febrero, subrayando que "solo dependemos de nosotros".

En un llamado a la acción, Rodríguez Pérez cerró el evento reiterando la importancia de votar para garantizar una Galicia alejada del tumulto y solicitó a aquellos votantes con 'sentidiño' que no se queden en casa el domingo.

Esta última jornada de cierre de campaña se presenta como un hito crucial en el camino hacia las elecciones gallegas, donde la incertidumbre política y los desafíos de estabilidad configuran un escenario de tensiones y expectativas para el futuro de Galicia.