El Balonmano Torrelavega está sumido en una vorágine de partidos que comenzó el pasado fin de semana en la cancha de un equipo siempre complicado como es La Rioja y que culminará por todo lo alto, con uno de los capítulos más importantes para los aficionados cántabros, como será la primera entrega del derbi de la presente temporada. El equipo naranja se cruzará por vez primera con el Sinfín y dicho cruce ya tiene día y hora. Cada uno puede ir ya preparando sus planes para no perdérselo porque será el sábado 19 a las siete de la tarde en el Vicente Trueba.

El pasado curso, el duelo entre vecinos tuvo un orden opuesto y se jugó primero en La Albericia y después en Torrelavega. Lo que no varió fue el resultado porque ambos fueron ganados con autoridad por los hombres de Álex Mozas. Éstos han cogido ya una buena velocidad de crucero porque, de hecho, han conseguido llegar a esta apretada fase del calendario tras enlazar tres victorias consecutivas. Especial mérito tuvo la del pasado sábado, ya que el Balonmano Logroño La Rioja se venía mostrando como uno de los equipos más en forma de la competición al haber enlazado cuatro victorias consecutivas. Sin embargo, no hubo una quinta porque se puso en su camino el conjunto cántabro.

En Logroño inició el equipo pilotado por Álex Mozas dos semanas especialmente exigentes desde el apartado físico, ya que ha de jugar cinco partidos en catorce días. Entre ese encuentro en la capital riojana y el derbi, deberá jugar también contra el Ibiza, el Anaitasuna y el Cisne. Son encuentros importantes para mantenerse con vida en la Copa del Rey y para dar el salto definitivo en la clasificación liguera que le aleje de los puestos de abajo y le lleve a otro escalón. Se medirá con equipos ante los que está en disposición de seguir aumentando la racha de triunfos porque evitará a los gigantes de la categoría.

Con todo, en lo que piensa ahora el conjunto cántabro es en la Copa del Rey, de la cual pasó de puntillas el curso pasado. Prefirió sacrificarla para centrarse en la pelea liguera. Perdió con holgura en su cancha contra Anaitasuna aprovechando para permitir el debut de juveniles y repartir muchos minutos. En esta ocasión, cuando se prevé que no tenga tantas urgencias ligueras, es posible que afronte con más ambición la competición copera. Es posible que incluso tenga en cuenta que clasificarse para la fase final le permitiría disputarla con buena parte de sus aficionados, ya que será bien cerca. Concretamente, en Santander. Por eso mismo no tendrá que jugar las eliminatorias el Sinfín, ya que está directamente clasificado por ser el anfitrión.

a las islas. Al equipo torrelaveguense le correspondió el Ibiza en la segunda eliminatoria copera, que es en la que le ha tocado subirse al carro. El equipo isleño es actualmente el tercer clasificado en la segunda división del balonmano español. La diferencia entre esta categoría y la Asobal suele quedar muy patente en este tipo de cruces y apenas se suelen dar sorpresas. El club naranja, además, querrá rentabilizar el esfuerzo económico que supone esta eliminatoria en cuanto al desplazamiento se refiere siguiendo vivo en el torneo y confiando en llevarlo para su casa.

En concreto, los hombres de Álex Mozas viajarán mañana mismo en avión para jugar a las ocho y media de la tarde. El viaje de vuelta deberá esperar al día siguiente, por lo que la expedición no estará en casa hasta el jueves. Esto quiere decir que apenas habrá tiempo para preparar el encuentro liguero contra Anaitasuna del próximo sábado. El equipo navarro llegará al Vicente Trueba con un punto menos en la clasificación, ya que tiene siete por los ocho que ya tiene el Bathco Torrelavega, lo cual le ha permitido instalarse en una zona cómoda de la tabla. Le costó arrancar pero parece que los de naranja han adquirido ya la velocidad de crucero que todo el mundo esperaba de ellos.

Tampoco tendrá mucho tiempo Álex Mozas para preparar el siguiente compromiso porque será en martes. Habrá liga entre semana para recuperar el parón por compromisos internacionales de la selección de hace un par de semanas y, en concreto, al equipo naranja le tocará viajar de nuevo para jugar, el martes día quince, en Pontevedra contra el Cisne. Será la penúltima parada de estas intensas dos semanas que concluirán el sábado 19 con el derbi. Curiosamente, la última parada del Sinfín previa al duelo vecinal será contra el otro equipo gallego, pero en su caso será en La Albericia. En concreto, recibirá al Cangas también el martes. Serán encuentros importantes para ambos y que pueden marcar el estado de ánimo con el que los dos lleguen a la gran cita.

El enfrentamiento entre los dos equipos cántabros de Asobal está marcada en rojo desde que se sorteó el calendario. Para el Sinfín supone una deuda pendiente después de haber perdido 19-27 el disputado en La Albericia el curso pasado y 27-23 el que se jugó en el Vicente Trueba. Con todo, ninguno de los dos quiere adelantar acontecimientos para centrarse en sus próximos compromisos. El equipo de Garabaya ya puede estar centrado en el duro examen que tendrá el próximo fin de semana, cuando deba jugar en Artaleku contra Bidasoa, al estar liberado de la Copa del Rey, que es, a estas horas, en lo que está centrado el equipo de Torrelavega.