MADRID, 24 (EUROPA PRESS)

Asociaciones provida han mostrado su rechazo a la reforma de la ley del aborto de Irene Montero, que quiere permitir el aborto a menores de 16 y 17 años sin permiso paterno y que elimina los tres días de reflexión, y han pedido que, en su lugar, se ofrezca más acompañamiento y ayudas a mujeres embarazadas en situación vulnerable o con diagnóstico prenatal negativo.

"Parece ya una obsesión compulsiva por que las mujeres aborten y por combatir todo lo que pueda hacerles plantearse no hacerlo", ha declarado a Europa Press la presidenta de la Federación Española de Asociaciones Provida, Alicia Latorre.

A su juicio, hay "no solo un desprecio hacia ese hijo que va a morir destrozado, sino que se favorece que la mujer tome una decisión irreversible en un momento de gran confusión y a menudo angustiada por su situación", una decisión que, según añade, "deja secuelas gravísimas a todos los niveles".

Por otro lado, ha criticado que con esta reforma se "pretende que haya un abortista en cada hospital" que, a su juicio, es "como si se obligara a que en cada unidad de bomberos hubiera un pirómano".

Según el presidente de la Fundación +Vida, Álvaro Ortega, "lo que debería garantizar el Gobierno en todos los hospitales públicos es que existan unidades de cuidados prenatales, cirugía fetal en caso de problemas de salud en el niño y una unidad de acompañamiento para mujeres en desamparo social", y pide planes de ayudas "reales y efectivas" para las madres en dificultades.

Además, advierte de que, en un momento en que "los problemas de salud mental y la tasa de suicidios están en auge" en los adolescentes, "con el aborto liberalizado en estas edades se podrían acentuar gravemente por el fuerte impacto psicológico que tiene".

SEÑALAR PÚBLICAMENTE A MÉDICOS

Respecto al registro de objetores, Ortega critica que el Gobierno "pretende señalar públicamente a los médicos que cumplen con el juramento hipocrático que rige su vocación: salvar vidas, nunca acabar con ellas". "Por eso la mayoría son incapaces de hacerlo y es tan difícil encontrar un hospital público donde se practiquen abortos", ha asegurado.

La presidenta de Voz Postaborto, Esperanza Puente, ha opinado que lo que necesitan las mujeres ante un embarazo imprevisto o un diagnóstico prenatal negativo es "acompañamiento, acogida y ayuda" y ha criticado que esto no lo ofrece ni el Ministerio de Igualdad ni las feministas que las "abandonan" pues "solo les ofrecen matar a los hijos".

"Desde el Ministerio de Igualdad hablan desde la ignorancia, no conocen la realidad que viven las mujeres cuando se enfrentan a una maternidad en vulnerabilidad o a un diagnóstico prenatal negativo, no conocen el sufrimiento, esas mujeres necesitan ser ayudadas", ha subrayado Puente en declaraciones a Europa Press.

Además, la presidenta de Fundación REDMADRE, Maria Torrego, ha lamentado que se eliminen los tres días de reflexión porque considera que es un periodo importante para poder "madurar la decisión, ponderarla" e "informase mejor de los apoyos de muchas organizaciones".

UN ATAJO PARA QUE DECIDAN ABORTAR

"Eliminar esos tres días de reflexión es el atajo perfecto para dificultar la capacidad de acoger un embarazo, mientras que si se les ofrece apoyo y acompañamiento, como bien sabemos en REDAMDRE, muchas mujeres toman una decisión diferente. En nuestra experiencia, 8 de cada 10 mujeres embarazadas con dificultades siguen adelante con su embarazo cuando se les ayuda", ha declarado Torrego a Europa Press.

Desde Derecho a Vivir tachan las medidas de "sarta de disparates". "Irene Montero quiere dejar solas a nuestras hijas ante la decisión de abortar, de poner fin a su embarazo y acabar con la vida du su hijo", ha criticado la portavoz de Derecho a Vivir, Inmaculada Fernández, en declaraciones a Europa Press.

En este sentido, ha manifestado que la ministra "promueve un plan contra las mujeres, ya sean madres o hijas" y se ha mostrado sorprendida por el hecho de que las menores de edad no pueden votar ni conducir pero sí abortar. Frente a esta ley, Fernández ha avanzado que, con motivo del Día Internacional de la Mujer, el 8 de marzo, Derecho a Vivir presentará una iniciativa para ayudar a las mujeres embarazadas.