Viena, 7 mar (EFE).- La Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE) continúa sus esfuerzos para sacar de Ucrania a los últimos miembros de su misión internacional de observadores, desplegada en ese país desde 2014.

"Seguimos trabajando para evacuar de Ucrania al último equipo de miembros de la misión internacional", confirmaron hoy a Efe fuentes de la organización en Viena.

Además, la OSCE está intentando llevar a refugios seguros al personal de nacionalidad ucraniana que trabaja en la llamada "Misión Especial de Observación" (SMM, en sus siglas en inglés), cuyo objetivo era vigilar el alto el fuego en el Donbás entre fuerzas ucranianas y separatistas prorrusos.

Con respecto a la situación de sus enviados en la ciudad de Mariúpol, en el sureste de Ucrania, la fuente indicó que de momento no estaba en condiciones de aportar información.

En su último comunicado, la SMM dijo ayer domingo que había recibido informes de que los locales de la misión en Mariúpol sufrieron daños por bombardeos, tanto el edificio que servía de sede como dos vehículos de la misión, que fueron incendiados.

Antes del comienzo de la invasión rusa a Ucrania el pasado día 24, "a todas las partes (del conflicto)" se les había comunicado las coordenadas de los locales de la SMM en Mariúpol "para asegurar su protección", recordó el comunicado.

Por otro lado, se ha completado la evacuación a suelo ruso del equipo de vigilancia que estaba en la sureña ciudad ucraniana de Jersón, actualmente controlada por el ejército ruso.

Al día de ayer, el proceso de evacuación de los miembros de la misión internacional estaba "casi completado".

Sin embargo, la reubicación de los ciudadanos ucranianos que estaban destinados en Mariúpol seguía pendiente "por motivos de seguridad", y otro convoy de miembros de la misión nacional de Kiev había comenzado su desplazamiento fuera de la capital.

El pasado 24 de febrero, inmediatamente después de la entrada en Ucrania del ejército ruso, la OSCE anunció que procedía a retirar a todos sus observadores de la parte este de Ucrania, donde desde 2014 la SMM, con unos 500 expertos de diversos países, vigilaba la línea del alto el fuego entre las tropas estatales y los separatistas prorrusos.

Una mujer ucraniana que integraba la misión en la ciudad de Járov murió el pasado martes durante un bombardeo ruso. EFE

wr/ah