Alicante, 25 feb (EFE).- La ficción española en las plataformas televisivas apuesta por los géneros dramáticos frente a la caída de las producciones de comedia, que tan presentes estuvieron en la oferta de años anteriores en la televisión generalista.

Así consta en el informe "Las series españolas en 2021", elaborado por Teletropías, el Observatorio del discurso televisivo de ayer y de hoy de la Universidad de Alicante (UA).

Durante 2021, el 82 % de la producción se focalizó en productos de corte dramático, la comedia ocupó el 11 % de la oferta y el género híbrido del dramedy (comedia y drama) representó un 7 % del total de las producciones registradas durante ese año, de acuerdo con este trabajo.

Dentro de la producción dramática, los géneros preferidos fueron el documental, con un 44 %, y el 'thriller', que representa el 30 % de la producción dramática.

La ficción española "vive un momento de esplendor derivado de la buena acogida que están teniendo las series en las plataformas de video on demand (VDO), televisión a la carta", ha explicado una de las autoras del estudio, la profesora Tatiana Hidalgo, del Departamento de Comunicación y Psicología Social de la UA.

Un esplendor, a su juicio, "no solo a nivel de recepción y de consumo, sino también teniendo en cuenta la apuesta por la producción propia y la coproducción entre las propias plataformas y las productoras audiovisuales".

"Debemos destacar que estos productos seriados traspasan las fronteras nacionales y, muchos de ellos, han visto la luz en otros países, convirtiéndose en productos de éxito fuera de España", ha resaltado.

Según Hidalgo, "este indicador postula a la ficción española como un producto audiovisual rentable a nivel global, algo que, por otra parte, han corroborado productos de gran éxito mundial, como es el caso de la serie 'La casa de papel', convertida en un fenómeno de masas internacional", añade.

La ficción española de las plataformas está construyendo, poco a poco, un nuevo canon televisivo que aborda tanto la forma de hacer como la forma de contar.

A nivel formal, como se destaca en el informe, se evidencia una apuesta por series de pocas temporadas y con una media de ocho capítulos, a diferencia de la extensión en temporadas a la que acostumbraba la ficción generalista.

También ha mencionado Hidalgo el aumento de los formatos de miniserie, que cada vez adquieren mayor importancia en la programación general. "Se trata de píldoras de ficción que abordan narrativas muy específicas, muchas veces históricas o biopics (biográficas), y que se han postulado como productos favoritos entre las audiencias gracias, entre otras cosas, a la rapidez de su consumo", ha dicho.

"Deberemos seguir de cerca la evolución de las miniseries en el año 2022, para ver si esta tendencia detectada sigue desarrollándose y consolidando a este formato", ha apuntado.

La televisión generalista, por su parte, ha reducido a niveles mínimos su producción de ficción y, cuando lo hace, desarrolla productos pensados para sus propias plataformas in streaming, algo que permite augurar un posicionamiento de la ficción televisiva en las plataformas frente a otros géneros, como la telerrealidad, que siguen ocupando un espacio privilegiado en las parrillas televisivas.

"Estamos, por tanto, ante un momento paradigmático en el que los nuevos hábitos de consumo han posicionado a los formatos de ficción en plataformas de libre consumo frente a la organización semántica de los contenidos de la televisión generalista", según la profesora de la UA. EFE

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