Redacción deportes, 5 feb (EFE).- Escocia se apuntó por segundo año consecutivo la Copa Calcuta, el partido más antiguo del mundo, al imponerse en su templo de Murrayfield a Inglaterra (20-17) en un partido que se encaminaba hacia el XV de La Rosa que cambió un error de Luke Cowan Dickie.

Había remontado Inglaterra gracias a un gran Marcus Smith (10-17), pero a un cuarto de hora para el final una acción en la que Cowan Dickie desvió el balón oval fuera del campo cuando era el último defensor fue penalizada por el colegiado neozelandés Ben O'Keeffe con ensayo de castigo y amarilla al jugador inglés, que se tenía que retirar y dejar a su equipo en inferioridad durante diez minutos.

Escocia pasó de ir a remolque a tener el marcador empatado y a aprovechar la ausencia del jugador de los Exeter Chiefs para sellar la victoria con un golpe de castigo transformado por Finn Russell a nueve minutos del final.

El conjunto de Gregor Townsend sacó así el máximo rendimiento a los errores de Inglaterra, que se presentaba en el torneo como uno de los grandes aspirantes al triunfo final y a relevar en el palmarés a Gales, pero, como los defensores del título, que cayeron en Dublín, ya van a remolque.

En Murrayfield, tras perder el pasado año en Twickenham ante los escoceses, Inglaterra se había encomendado a una de sus nuevas grandes esperanzas, Marcus Smith, para aplacar al duro cuadro local, que con un ensayo de Ben White transformado de Russell y otro golpe de castigo habían tomado ventaja al descanso (10-6).

Smith, con dos golpes de castigo y un ensayo, había situado a Inglaterra en una situación privilegiada (10-17), pero la acción de Cowan-Dickie lo cambió todo. La defensa y saber mantener la concentración le concedieron a Escocia su segunda Copa Calcuta consecutiva, algo que no lograba desde 1983 y 1984. EFE

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