La agresora sigue en la Unidad psiquiátrica del hospital Infanta Sofía, custodiada por la Guardia Civil, hasta pasar a disposición judicial

MADRID, 21 (EUROPA PRESS)

La dueña del supermercado de El Molar apuñalada ayer por Noelia de Mingo recibió el alta hospitalaria y ya se encuentra en su casa recuperándose de sus heridas, mientras que la cajera del establecimiento, acuchillada en dos ocasiones por la agresora, permanece en el hospital pero evoluciona favorablemente, han indicado a Europa Press fuentes sanitarias.

Esta última fue herida por arma blanca en el hemitórax izquierdo. Tras ser estabilizada por los sanitarios del Summa, fue trasladada grave en un helicóptero al Hospital 12 de Octubre. La otra víctima tenía varias heridas incisas de carácter moderado en la espalda y costado izquierdo. Fue evacuada en ambulancia a La Paz, de donde ya ha salido.

Por su parte, la agresora continúa en la Unidad de Psiquiatría del Hospital Infanta Sofía de San Sebastián de los Reyes, donde ingresó de forma forzosa, en calidad de detenida y custodiada por la Guardia Civil a la espera de que pase a disposición del juez, que previsiblemente la envíe a una cárcel psiquiátrica a la espera del nuevo juicio.

De Mingo, que mató en 2003 a tres personas e hirió gravemente a cinco cuando ejercía de médico residente en la Fundación Jiménez Díaz, tiene actualmente 49 años y su salud física es buena, ya que no presentaba ninguna herida tras apuñalar a las dos mujeres ayer, pero su estado psiquiátrico está muy alterado. Padece paranoide crónica.

LA NUEVA AGRESIÓN MÚLTIPLE

La agresión múltiple se produjo sobre 12:03 horas de este lunes en el comercio MaxCoop Unide, situado en la avenida de España número 41. Allí ha llegado Noelia y, sin mediar palabra, sacó de entre sus ropas un cuchillo de unos 20 centímetros de largo y apuñaló en el pecho a Virginia, una de las cajeras, de 46 años.

Luego se dirigió al interior de la tienda, donde estaba la encargada, de 53 años, que ante los gritos de su empleada la ha visto venir y ha intentado zafarse, pero recibió varias heridas superficiales. Salió corriendo y se refugió en la farmacia El Molar, situada enfrente.

Las dos empleadas, Adriana y Yolanda, confirmaron a los medios de comunicación que la encargada de la tienda se refugió allí y que inmediatamente después cerraron el establecimiento para evitar que entrara De Mingo. "Aquí no ha llegado a entrar. Estamos todos bien y la dueña tenía dos heridas, pero bien, solo nerviosa, como nosotras", relataron.

Varios testigos intentaron frenar nuevas acciones de la agresora, mientras llamaban a la Policía y se encerraban en casas o tiendas cercanas. Minutos después, dos policías locales de El Molar consiguieron desarmar y detener a la autora, tras intentar escapar y acuchillar a uno de los agentes.

Ahora, la Guardia Civil está investigando lo ocurrido. Según las primeras pesquisas, De Mingo, que estaba bajo custodia de su madre y en tratamiento regulada por el centro médico, aprovechó que su madre tenía una cita médica para coger un cuchillo y salir sola. Normalmente iba acompañada a todos los sitios por su progenitora octogenaria. Se teme que hubiera dejado de tomar la medicación y sufriera otro brote psicótico.