Viena, 23 feb (EFE).- Las violaciones del alto el fuego continuaron el martes en el Este de Ucrania, un día después de que Rusia reconociera la independencia de las regiones de Lugansk y Donetsk, donde separatistas prorusos se enfrentan desde 2014 al Gobierno central, informó hoy la OSCE.

En las dos provincias se contabilizaron ayer 1.710 violaciones del alto el fuego en vigor desde hace siete años, pero que nunca se ha cumplido plenamente, entre ellas 1.420 explosiones, informó la misión de observadores que tiene sobre el terreno la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE).

En la jornada anterior se registraron 1.927 violaciones del alto el fuego y 1.481 explosiones.

Esas cifras suponen una estabilización del número de incidentes documentados tras varios días en los que la OSCE reportó un progresivo aumento de la violencia, pero siguen estando por encima de la media de la última semana y son casi cuatro veces más altas que el promedio de lo que va de año.

Los observadores de la OSCE informaron del uso de sistemas de lanzamiento múltiple de cohetes, fuego de ametralladoras pesadas y armas cortas.

En su informe, los observadores señalan que vieron limitada su libertad de movimiento en pasos de control controlados por los separatistas.

Además, las señales de GPS de las aeronaves no tripuladas (drones) operadas por los observadores de las OSCE fueron interceptadas y obstruidas.

Rusia anunció el lunes que reconoce como independientes las autoproclamadas Repúblicas Populares de Lugansk y Donetsk, y el envío de tropas que calificó de pacificación pero que ha sido condenado por Estados Unidos, la Unión Europa y Naciones Unidas. EFE

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