Zaragoza, 30 dic (EFE).- Aragón ha aprobado sus presupuestos para 2022 con los votos del cuatripartito (PSOE, Podemos, CHA y PAR), unas cuentas que suman 7.444 millones y que, según los portavoces de los grupos que las han apoyado, garantizan la estabilidad por tercer ejercicio consecutivo.

La elevada fiscalidad, la opacidad, el continuismo, la falta de control de los fondos europeos, la falta de ambición o el sectarismo han sido algunos de los argumentos esgrimidos por la oposición para rechazar las cuentas, cuya toma en consideración en el primer trámite parlamentario, sin embargo, salió adelante con la abstención de IU y Ciudadanos.

Tras un debate que se ha prolongado por espacio de casi diez horas y en el que se han analizado las cuentas de todas las secciones por separado, el presupuesto de 2022, con un techo de gasto no financiero de 6.080 millones, ha salido adelante y podrá comenzar a ejecutarse a partir de este mismo día 1.

La sesión se ha desarrollado con medidas extraordinarias de seguridad debido a la séptima ola de la pandemia de la covid, con la presencia durante el debate de solo el cincuenta por ciento de los diputados y el voto telemático de nueve parlamentarios.

Desde el PP, Mar Vaquero ha argumentado las razones por las que su grupo ha votado en contra de las cuentas, que ha considerado que se basan en unas previsiones macroeconómicas que no ha avalado "nadie", que vuelven a hipotecar el futuro de los ciudadanos al dispararse la deuda y que adolecen de una "total y absoluta opacidad y falta de transparencia".

El diputado de Ciudadanos José Luis Saz ha lamentado no haber podido hacer otra cosa que dar un "no" a las cuentas. Un "no", ha agregado, que "no es rabioso ni demoledor" y que se debe a la incapacidad de llegar a acuerdos "suficientes" en el trámite de ponencia y comisión.

La diputada de Vox Marta Fernández ha criticado duramente los presupuestos que, ha lamentado, incluyen "viejas recetas de la izquierda" que provocarán "más colas del hambre, más pobreza, incremento de precios y de impuestos".

Y desde IU, Álvaro Sanz, tras lamentar el "discurso feroz" de la "ultraderecha más reaccionaria", ha argumentado su oposición a las secciones en las que el gobierno no ha aceptado sus enmiendas y ha lamentado el "poco esfuerzo" para el entendimiento. EFE

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