Renfe, la principal operadora ferroviaria de España, ha anunciado este lunes la implementación de una prohibición integral para el transporte de patinetes eléctricos y otros dispositivos de movilidad personal en todos sus trenes a partir del 12 de diciembre.

La medida, que afecta a los servicios de Cercanías, Regionales, Alta Velocidad y Larga Distancia, incluyendo el AVE, se basa en preocupaciones de seguridad relacionadas con incendios de baterías registrados en algunos transportes públicos. Según la compañía, estos incidentes han sido provocados por diversos factores, como la manipulación de la batería, daños por golpes, el uso de cargadores no autorizados, entre otros.

La decisión de Renfe también se extiende a otros dispositivos de movilidad personal eléctricos o alimentados por baterías, como monociclos, y no se limita únicamente a patinetes eléctricos. Se exceptúan de esta prohibición los vehículos de personas con movilidad reducida y las bicicletas eléctricas.

La medida será ratificada en la próxima reunión del consejo de Administración de Renfe Viajeros. La empresa ha subrayado que esta acción se ha tomado en aras de la salud pública y la seguridad de los pasajeros, alineándose con restricciones similares aplicadas en varias ciudades de España y Europa.

La iniciativa de Renfe sigue la tendencia de ciudades como Sevilla, que en 2021 prohibió el acceso al metro con patinetes eléctricos durante las horas pico laborales, y Cataluña, que impuso restricciones después de una explosión de un patinete en el servicio de Ferrocarriles de la Generalitat de Cataluña en noviembre de 2022. Además, desde el 4 de noviembre, está prohibido el acceso de patinetes eléctricos al transporte público de la Comunidad de Madrid gestionado por el Consorcio Regional de Transportes.