Los Libres 2 del Gran Premio de Bahréin ofrecieron un espectáculo intrigante y revelador en cuanto al rendimiento de los distintos equipos de Fórmula 1. Mientras algunos, como Mercedes, liderados por Lewis Hamilton, exhibieron el verdadero potencial de su motor y su capacidad para exprimir al máximo el rendimiento de su monoplaza, otros optaron por una estrategia más conservadora.

Hamilton, al llevarse el mejor tiempo en esta sesión de prácticas, demostró una vez más su habilidad para exprimir al máximo el rendimiento de su coche, marcando la pauta para el equipo Mercedes. En contraste, Max Verstappen y Red Bull parecían más cautos, con un rendimiento más discreto que dejó sorprendidos a muchos observadores. 

El sexto puesto del tricampeón con el RB20, aparentemente lento en sus reacciones y con una velocidad punta decepcionante, contrastó notablemente con el desempeño agresivo de Hamilton. Por otro lado, George Russell sorprendió al colocarse en el segundo lugar, demostrando el potencial del equipo Mercedes en general. Fernando Alonso también se destacó al asegurar el tercer puesto, lo que sugiere un progreso prometedor para Alpine. El rendimiento de Aston Martin sigue siendo una incógnita, aunque parece que podrían estar en una posición competitiva similar a la de McLaren. La actuación de Ferrari generó especulaciones, ya que su decisión de jugar al despiste podría indicar un potencial no revelado o, posiblemente, problemas con el rendimiento del motor en comparación con Mercedes.

La sesión dejó muchas preguntas sin respuesta y plantea un escenario emocionante para la calificación y la carrera. Con Red Bull y Ferrari manteniendo su posición en el misterio, queda por ver cómo se desarrollarán las próximas etapas del fin de semana de carrera en Bahréin y si alguno de los equipos podrá superar a Mercedes en la lucha por la pole position y la victoria.

Verstappen mejor ritmo

En el FP2 de la primera carrera del año, los equipos optaron por ocultar más información de lo habitual, especialmente cuando se trató de simular tandas largas con neumáticos blandos, imitando así el primer tramo de la carrera del domingo. En esta fase de prácticas, surgieron diferencias significativas en cuanto al ritmo de carrera. Max Verstappen se destacó como el mejor, registrando un impresionante promedio de 1:36.5 en sus simulaciones de carrera con neumáticos blandos. Mercedes, por su parte, se situó en 1:36.8, cifra muy similar a la obtenida por Charles Leclerc y Carlos Sainz de Ferrari. Fernando Alonso y los McLaren mostraron un rendimiento ligeramente inferior en comparación con estos equipos líderes.

Este escenario plantea un rompecabezas para los equipos y sus estrategias de carrera. Sin embargo, esta primera impresión del fin de semana sugiere que Verstappen y Red Bull tienen un ritmo sólido y prometedor para la carrera del domingo. La incertidumbre sobre el rendimiento de los demás equipos añade un elemento intrigante a la competencia, dejando a los aficionados ansiosos por ver cómo se desarrollará la carrera.

Alpine en problemas

Alpine parece haber tenido un comienzo difícil en el Gran Premio de Bahréin, con Pierre Gasly clasificando en el puesto 16º y Esteban Ocon en el 18º. Según informes de la televisión francesa, el equipo está lidiando con problemas significativos, incluido un exceso de peso de 10 kilogramos en el nuevo coche y dificultades en el departamento de aerodinámica. Estos problemas combinados les estarían costando alrededor de medio segundo por vuelta en comparación con su rendimiento potencial óptimo.

Para Alpine, esto plantea un desafío importante, ya que necesitarán trabajar arduamente para superar estas dificultades y mejorar su rendimiento en las próximas carreras. Si bien es cierto que el Circuito Internacional de Bahréin históricamente no ha sido el más favorable para el equipo, la esperanza reside en que puedan recuperarse en eventos futuros. 

Específicamente, en el Gran Premio de Arabia Saudita, que se caracteriza por una configuración de carga aerodinámica media a baja en el Circuito de Jeddah, lo que podría favorecer el rendimiento del Alpine si logran resolver sus problemas técnicos y de peso. En resumen, el equipo tendrá que ponerse a trabajar y aprovechar las próximas oportunidades para recuperar terreno en la parrilla de salida.