En una conferencia de prensa realizada durante la presentación de los datos de afiliación y desempleo de diciembre, el secretario de Estado de Trabajo y Economía Social, Joaquín Pérez Rey, ha respondido enérgicamente a las críticas de expertos que cuestionan las reformas propuestas por el Ministerio de Trabajo. En particular, Pérez Rey abordó un estudio reciente de la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea), que estima un impacto económico adicional de 2.500 millones de euros al año debido a la reforma del subsidio por desempleo.

Según la investigación de Fedea, la reforma, aprobada por el Gobierno, aumentaría las necesidades financieras de España en 2.500 millones de euros anuales, representando un 0,17% del Producto Interior Bruto (PIB). El estudio sugiere que este incremento se debe al aumento potencial de beneficiarios, que podría llegar a 400.000 nuevos receptores, así como a la extensión de la duración de la prestación en ciertos casos y el aumento de la cuantía del subsidio.

Contrariamente a estas afirmaciones, Pérez Rey ha declarado que el estudio de Fedea carece de "bases sólidas reales" y ha cuestionado la metodología utilizada. Además, ha señalado que para alcanzar la cifra propuesta por el estudio, se requeriría un aumento del 56% en el número de beneficiarios, algo que él considera poco probable.

El secretario de Estado de Trabajo ha asegurado que la reforma no solo aumenta la cuantía de los subsidios, sino que también incorpora dos nuevos colectivos, facilita el proceso de solicitud, simplifica el sistema y elimina el mes de espera, que anteriormente actuaba como un "castigo" para aquellos sin otra opción que recurrir al nivel asistencial de desempleo.