29.04.2024 |
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PRESUPUESTOS 2024 Y FALSAS ESPERANZAS

Buruaga se vende al ‘revillismo’ y traiciona sus promesas electorales

En las últimas elecciones autonómicas los ciudadanos de Cantabria votaron cambio, pero fue un espejismo y Sáenz de Buruaga ha revivido lo peor del viejo PP: priorizar la aritmética electoral a los principios y a los compromisos con los cántabros, denuncia la portavoz de Vox, Leticia Díaz

Estas fueron algunas de sus promesas

Vox denuncia que Buruaga "olvida el enchufismo" en CANTUR y la corrupción en Obras Públicas para "repartirse el botín" con Revilla

Parece que lo que empezó como un acuerdo de investidura se está llevando a cabo durante la legislatura. El Gobierno del PP y el PRC han alcanzado un acuerdo para aprobar los presupuestos de Cantabria para 2024
Buruaga se vende al ‘revillismo’ y traiciona sus promesas electorales

Una oportunidad menos para hacer las cosas de manera correcta. Otra oportunidad perdida para dejar atrás las viejas formas de hacer política y renovarse con valentía. Esto es lo que está pasando en Cantabria con la nueva presidenta, abrazándose al "revillismo", de los que sobrevuela años de corrupción y enchufismo. Como así lo denuncia el partido constitucional, Vox.

El Partido Popular  de Cantabria ha dado un giro sorprendente al renunciar a su promesa de cambio y adherirse a las directrices del Partido Regionalista de Cantabria (PRC) para la aprobación de los presupuestos, según Vox. Esta decisión ha generado críticas y descontento entre algunos sectores. Gran parte de los votantes del PP, ven este acuerdo puntual, como una deslealtad y una vez más, falta de valentía por parte de la Sr. Buruaga.

En las elecciones autonómicas recientes, los ciudadanos de Cantabria expresaron un claro deseo de cambio, pero parece que esta aspiración se ha desvanecido, según la percepción de Vox. La líder del PP, María José Sáenz de Buruaga, ha sido acusada de priorizar la estrategia electoral por encima de los principios y compromisos con los ciudadanos, reviviendo lo peor de las prácticas políticas anteriores, según la opinión de Vox. La firma del acuerdo presupuestario entre Sáenz de Buruaga y el líder del PRC, Miguel Ángel Revilla, ha dejado al descubierto un aspecto que ambos habían mantenido en secreto desde el pacto de investidura, en opinión de Vox. Esta acción se interpreta como un ejemplo de viejas prácticas políticas que sacrifican principios y la participación ciudadana en favor de acuerdos de conveniencia. Ahora, el PP se encuentra en una alianza donde parece que los intereses de regionalistas y socialistas son más importantes que sus propios principios, según la opinión de Vox.

Según Leticia Díaz, portavoz de Vox en el Parlamento de Cantabria, «todas las cuestiones que enarboló el Partido Popular durante la última legislatura han caído en saco roto. Este acuerdo suena más a un reparto del botín y a taparse las vergüenzas, que al anhelo de liderar el cambio que necesita la sociedad cántabra. De repente, ha desaparecido el enchufismo de CANTUR, pues el PP no va a hacer nada al respecto; se ha devaluado, todavía más, la ya mínima bajada de impuestos, que se atrevieron a tildar de revolución; la utilización de fondos europeos para pagar las nóminas de personal, que denunciaron, ahora dicen que fue correcta… Sólo falta que este PP, diga que la red de corrupción de la Consejería de Obras Públicas nunca existió. Hace tan solo tres semanas votaron la derogación de la Ley de Memoria Histórica, hoy han cerrado con el revillismo dilatar ese proceso siguiendo los dictados regionalistas. El Partido Popular de Cantabria no es de fiar, nunca cumple cuando le toca tomar decisiones de gobierno. Lo hemos visto con las becas para el bachillerato concertado o con su alineamiento a favor del adoctrinamiento sectario en las aulas, votando junto a PSOE y PRC, sin haber optado si quiera por la abstención.

La intervención de Revilla en la firma del acuerdo para la aprobación de los Presupuestos para 2024, señalando que todo es continuismo en este presupuesto, tendría que hacer pensar a los dirigentes populares para recordarles que el PRC gobernaba con el Partido Socialista, y las políticas de un gobierno son colegiadas. Parece que la presidenta Saénz de Bururaga está más cerca de las políticas públicas del PSOE y del PRC, que de las de la señora Ayuso. Vox asegura que seguirá denunciando este fraude al electorado, el mismo que practicaron antes Sánchez y Revilla, promesas vacías de contenido, que ahora reproduce Buruaga.

En esa misma línea de desidia hacia sus propios postulados, el Gobierno de Cantabria ha comunicado que la presidenta no va a asistir a la jura de la Constitución de la Princesa de Asturias en el Congreso de los Diputados, por coincidir con una reunión de Gobierno, cuya fecha puede ser modificada por ella misma.

Desde Vox entienden que nuestra Comunidad debe estar representada por su máxima autoridad en el Ejecutivo, en un acontecimiento histórico de enorme valor constitucional, y en un momento trascendental para la historia de España, por los ataques a la Carta Magna que se quieren perpetrar con la amnistía y el referéndum de autodeterminación. Pedimos, pues, a la Presidenta que cumpla con su deber como mandataria autonómica y asista a la Jura de la Constitución por parte de la Princesa de Asturias.

PARA EL PP, «EJEMPLO DE DIÁLOGO»

Por su parte, del el PP, el portavoz parlamentario y coordinador general, Juan José Alonso, ha destacado que el acuerdo firmado por la presidenta de la regiób, María José Sáenz de Buruaga, y el secretario general del PRC, Miguel Ángel Revilla, es «un ejercicio de responsabilidad con altura de miras y un ejemplo de diálogo eficaz muy positivo para Cantabria».

Ha destacado que es este acuerdo permitirá que la comunidad autónoma pueda contar con presupuestos el 1 de enero de 2024, como marca la ley, al tiempo que ha lamentado que haya grupos políticos que hasta ahora no han hecho «ninguna propuesta» más que la crítica a un documento que aún no se ha registrado.

«MALO PARA CANTABRIA»

Para el antiguo socio de Revilla, el PSOE, el presupuesto del PP es «malo para Cantabria» y que el apoyo del PRC «no lo mejora nada». El secretario general del PSC-PSOE y portavoz parlamentario, Pablo Zuloaga, ha opinado que «un apretón de manos que se vuelve a repetir y que empieza a ser habitual» ha dicho Zuloaga, después de que ambos partidos firmasen en junio un acuerdo con el que el PRC se abstuvo para facilitar la investidura de María José Sáenz de Buruaga al frente de un Gobierno en solitario.

Por ello el PSOE ha criticado que, con el pacto rubricado este viernes, «el PRC vuelve a ser la muleta del PP para aprobar unos presupuestos que no benefician a la mayoría social de Cantabria». El líder de los socialistas cántabros ha señalado que con acuerdos como éste parece que los regionalistas «empiezan a fijar su rumbo político hacia la derecha, sin una estrategia organizada y convirtiéndose en cómplice de un PP que gestiona para beneficiar a quien más tiene y castigar a las familias trabajadoras».

«Lo que estamos viendo es que hay un PRC entregado a merced de Buruaga, cómplice de los recortes, las privatizaciones y la sanidad y la educación business», ha denunciado Zuloaga.

Y es que, a su juicio, este acuerdo es «una enmienda a la totalidad a los presupuestos» de la pasada legislatura, en la que el PRC gobernaba en coalición con el PSOE. El ejemplo «más claro» es la Ley del Suelo, aprobada por regionalistas y socialistas y que ahora se quiere modificar.

Buruaga se arrodilla y modifica su medida estrella la reforma fiscal

El acuerdo alcanzado entre PP y PRC para aprobar los Presupuestos Generales de Cantabria (PGC) para 2024 da continuidad a los grandes proyectos de la legislatura anterior e introduce cambios en la reforma fiscal elaborada por los ‘populares’ para beneficiar más a las rentas menores, en detrimento de las más altas. En concreto, recoge «equilibrar» la bajada del IRPF «compensando unos tramos con otros», ya que se apuesta por bajar un 0,5 del tipo en los tramos de entre 21.00 y 35.000 euros y entre 35.000 y 60.000 euros y detraerlo a los de más de 90.000 euros.

Además, en lugar de suprimir directamente el Impuesto sobre Patrimonio introduce una disposición transitoria para que se mantenga mientras exista el impuesto estatal de Solidaridad de Grandes Fortunas, con el objetivo de que los cántabros con patrimonios de más de 3 millones que tienen que pagar ese tributo lo sigan haciendo en la comunidad en lugar de a nivel nacional.

Para la presidenta de Cantabria, María José Sáenz de Buruaga, los cambios pactados con el PRC son «matizaciones de escaso alcance» sobre la reforma fiscal del PP, pues no afectan a la mayoría de tributos que se van a rebajar. Además, ha dicho que los acuerdos negociados con los regionalistas para poder sacar adelante los presupuestos -ya que los populares gobiernan en minoría- «no condicionan» su proyecto político y son de «pura coherencia».

Y es que los partidos han llegado a un «acuerdo puntual» para una ley concreta en base a propuestas que «mejoran el presupuesto y van en coherencia con nuestro programa de gobierno», ha defendido la presidenta en una rueda de prensa que ha dado este viernes junto al secretario general del PRC, Miguel Ángel Revilla, para dar a conocer el pacto y firmarlo.

Buruaga ha asegurado que el martes hizo un ofrecimiento a «todos» para negociar las cuentas y que «no han excluido a nadie». De hecho, los populares «continúan abiertos» a aportaciones de los otros grupos parlamentarios, PSOE y Vox, aunque reconoce que «no espera nada» de los socialistas, que están «instalados en la crítica corrosiva».

Por su parte, Revilla también ha hecho gala de la «coherencia» mantenida por su partido desde que facilitó la investidura de Buruaga con su abstención para que el PP gobernara en solitario, con el objetivo de que no tuviera que pactar con formaciones que podrían traer a Cantabria «retrocesos inasumibles» -en alusión a Vox- y de que no hubiera «ningún parón» en los proyectos en marcha.

Unos objetivos que mantiene y por los que, para evitar las «consecuencias nefastas» que tiene no poder aprobar los PGC, el PRC apoyará un presupuesto que, para Revilla, es «continuista» ya que recoge partidas para todos los grandes proyectos del Gobierno anterior (PRC-PSOE), como las obras del Museo de Prehistoria y Arqueología de Cantabria (MUPAC), el polígono de La Pasiega, la unidad de protonterapia en Valdecilla y la finalización del Centro de Arte Rupestre de Puente Viesgo. Además, ha dicho que son unas cuentas de «gran contenido social», pues priman la educación y la sanidad; municipalistas, porque benefician a los ayuntamientos con las obras; y que favorecen al medio rural.

En este sentido, se ha firmado que se presupuestará en los PGC la financiación del Plan de Inversiones Municipales, que pasa del 70%/30% de aportación Gobierno-municipio para las obras al 80%/20%, elevándose la inversión desde el Ejecutivo al 95% en el caso de los municipios catalogados en riesgo de despoblamiento. También se contempla un aumento del IPC a las partidas para las entidades locales menores y un aumento del IPC más un punto al Fondo de Cooperación Municipal.

LEY DE MEMORIA Y DEL SUELO

Por otro lado, el pacto incluye que la derogación de la Ley de Memoria Histórica aprobada la pasada legislatura por PRC-PSOE se tramite en el Parlamento como una ley ordinaria y no como estaba previsto a través de la Ley de Medidas Fiscales y Administrativas, conocida como ‘Ley de Acompañamiento’. En paralelo, después de que el PRC tendiera la mano para modificar la Ley del Suelo que elaboró junto a los socialistas, a petición de los regionalistas se ha acordado mantener reuniones con la Federación de Municipios de Cantabria y una comparecencia en comisión monográfica sobre la reforma para conocerla, también al margen de la aprobación presupuestaria.

Por otra parte, se prevé crear un fondo extraordinario de al menos 3 millones de euros para dar ayudas a las familias y empresas para paliar la inflación y una partida presupuestaria con una cuantía inicial de 100.000 euros -ampliable- para medidas de apoyo a cuidadores de personas dependientes, sean profesionales o familiares. Otro de los puntos introducidos por el PRC trata de «blindar» la enseñanza pública y prohíbe incluir nuevas partidas vinculadas a la educación concertada que no cuenten con acuerdo de la Junta de Personal Docente y de las asociaciones de padres y madres.

Reforma fiscal

Una de las mayores «discrepancias» entre PP y PRC a la hora de llegar a este acuerdo era la reforma fiscal de los populares, ya que los regionalistas no estaban conformes con la distribución de la bajada de impuestos porque «no era igualitaria», sino que favorecía a las rentas más altas.

Por ello, en las negociaciones se ha acordado crear un nuevo tipo a rentas a partir de 90.000 euros -antes el tope estaba en 60.000- para, en lugar de bajar su tipo al 22,5% como a las de más de 60.000, hacerlo a un 24,5%. Con ello, es posible bajar medio punto a rentas de entre 21.000 y 35.000 y entre 35.000 y 60.000 euros, pudiendo llegar al 14,5% y 18%. En cuanto al Impuesto sobre Patrimonio, el PRC también llevaba en su programa electoral suprimirlo como proponía el PP en su reforma inicial, pero entiende que hacerlo ahora «sería un contrasentido» porque se dejaría de pagar en Cantabria y se pagaría a nivel estatal, de ahí la disposición transitoria introducida para mantenerlo mientras exista el impuesto nacional que grava a las grandes fortunas. Este impuesto lo pagan unos 200 cántabros y con él se recaudan 6,8 millones, que sumados a la recaudación adicional que se obtendrá al haber reducido la rebaja del IRPF a las rentas de más de 90.000 permite compensar ese medio punto a los tramos de 21.000 a 60.000 euros.

Buruaga se vende al ‘revillismo’ y traiciona sus promesas electorales
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