23.04.2024 |
El tiempo

El Presupuesto del ‘sí es sí’

irene-montero-655x368
El Presupuesto del ‘sí es sí’

Ciertamente, a esta España no la reconoce ni la madre que la parió. El cerebro enfermo del Gobierno Frankenstein alumbró un engendro legislativo, la llamada Ley del “sólo sí es sí”, de resultados conocidos y nefandos.

Ni a uno de los más recalcitrantes socialistas de la democracia como Alfonso Guerra -autor de la frase que encabeza estas líneas- se le hubiera pasado por la cabeza semejante aberración jurídica. Pero la criatura informe ha nacido, es real y ha comenzado a generar efectos: desprotege a las víctimas, insulta a los jueces y sólo beneficia a los condenados.

El caso de la ya fracasada Ley de la ministra Irene Montero es uno de los mejores ejemplos de cómo ha gobernado Sánchez desde que es presidente del Gobierno de España. La frivolidad, el desconocimiento y la soberbia son sus sellos de identidad, legislando a golpe de slogan y pancarta, sin escuchar a los expertos y, mucho menos, a la oposición: al Partido Popular, que les avisó del error flagrante que estaban cometiendo.

Y si los resultados de una ley ya los vemos y los sentimos, la ley de Presupuestos Generales del Estado la sufriremos en breve. Unos presupuestos que nacen de malas previsiones, pivotados en acuerdos indignos que no garantizan la prosperidad económica de España y no están pensados mirando al futuro. Están diseñados con el único objetivo de garantizar la continuidad del presidente del Gobierno en La Moncloa.

Sánchez ha pactado con los herederos del terrorismo. El acuerdo firmado entre el Gobierno y EHBILDU-NAVARRA el pasado 22 de noviembre estipula reducir competencias de la Guardia Civil con aquellos que, precisamente, quieren echar a la Guardia Civil del País Vasco y Navarra.

En la misma onda diabólica están la transferencia de la competencia en materia de tráfico a Navarra antes del 31 de marzo. Y la gestión foral de los gravámenes a la banca y a las energéticas para su conversión a permanentes, de forma que su gestión esté condicionada a la participación de las Comunidades Autónomas antes citadas.

La Ley más importante del año resulta ser un reconocimiento a la inoperancia y la inutilidad del Ministro Garzón, un bolchevique de salón que ha criminalizado a todo un sector económico.

Estos presupuestos son un premio a la mentira, la mala praxis y la desvergüenza. Para muestra la reforma del Código Penal aprobada el pasado jueves en el Congreso de los Diputados, realizada con nocturnidad, alevosía y ad hoc para que puedan volver los políticos condenados por atacar al Estado.

Mientras tanto, la tormenta perfecta se está fraguando en los hogares y en las industrias. El Gobierno, lejos de calmar el día a día de los españoles, nos somete a un infierno fiscal y de precios al consumo. Cuatro años más de Sánchez y terminaríamos con una inflación a la argentina.

Estos presupuestos se olvidan de la realidad que sufren las familias y las empresas españolas, mientras el Gobierno se instala en su metaverso particular. Un universo post-realidad en el que un fin, su supervivencia, justifica cualquier medio.

El Presupuesto del ‘sí es sí’
Comentarios