18.04.2024 |
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Santander acogerá en diciembre la Copa Asobal

Será los días 19 y 20 y participará el Sinfín por primera vez en su historia junto a los tres primeros clasificados de la primera vuelta

El Sinfín tendrá la oportunidad de luchar en casa por un torneo importante. / ALERTA
El Sinfín tendrá la oportunidad de luchar en casa por un torneo importante. / ALERTA
Santander acogerá en diciembre la Copa Asobal

La próxima edición de la Copa Asobal se disputará en Santander. No habrá que esperar mucho para disfrutar de ella porque será el próximo mes de diciembre. En concreto, los días diecinueve y veinte, por lo que serán los partidos que cierren el año de balonmano en España. En un principio, está previsto que se celebre en el Palacio de Deportes, que, de esta manera, volvería a acoger un deporte, aunque todo dependerá de cómo avance la crisis sanitaria y de las limitaciones de aforo que sigan vigentes para entonces. Si son las mismas que ahora, la organización no descarta que se terminara jugando en La Albericia.

La noticia se dio a conocer oficialmente ayer, apenas un puñado de horas después de que la Asobal eligiera como presidente de la gestora que ha de llevar las riendas de la misma hasta que se elija una nueva junta directiva a Servando Revuelta hijo, director deportivo del Sinfín. Con todo, la designación de la capital cántabra no tiene nada que ver con este movimiento porque, en verdad, se daba por hecho desde varios días antes.

Elegir Santander hará que el Liberbank Cantabria disfrute de un parón invernal más corto que el de los últimos años porque le va a obligar a estar compitiendo casi hasta Navidad. Y es que, el equipo anfitrión tiene ya una plaza asegurada en la cita mientras que las otras tres serán para los tres primeros clasificados una vez que concluya la primera vuelta de la liga Asobal. No es difícil apostar que entre ellos estará el Barcelona mientras que las otras dos plazas estarán abiertas. Lo que es indudable es que permitirá disfrutar de un torneo concentrado en dos días de alto nivel, que suele generar un gran ambiente y que, además, permitirá a la capital cántabra situarse en el mapa de eventos deportivos de cierto prestigio.

El Sinfín ya había trabajado hace unos años para ser la sede de la fase final de la Copa del Rey pero se tuvo que bajar del carro por no contar entonces con ningún apoyo institucional. Y aquello sí habría sido una gran idea porque entonces no había ningún coronavirus condicionando la vida social europea y, por tanto, sí se podía haber disfrutado de la cita en todo su esplendor. Con la cita de diciembre la cosa será diferente porque, por muy bien que vayan las cosas, no se va a poder disponer de todo el graderío que ofrece el recinto comúnmente conocido como ‘La Ballena’.

El aforo del Palacio de Deportes ronda los cinco mil asientos pero, a día de hoy, las limitaciones que establece el Gobierno de Cantabria para eventos deportivos bajo techo impide superar las trescientas personas. Y eso afecta tanto al pabellón de La Albericia como a ‘La Ballena’. Por eso no está descartado que la Copa Asobal se termine disputando en La Albericia, donde esos trescientos seguidores serían capaces de generar un mejor y más intenso ambiente de balonmano.

No será la primera vez que Santander acoja esta competición pero sí será la primera vez que la dispute el Sinfín en su aún corta historia. Es muy caro entrar en ella si no es ejerciendo de anfitrión. Cuando la Copa pasó por la capital cántabra fue el extinto Teka quien la jugó. De hecho, llegó a sumar tres títulos de dicha competición.

Lo bueno que tiene el anfitrión es que, a la hora de sortear los emparejamientos de semifinales, será cabeza de serie, por lo que se evitará así al imposible Barça, que llegará como líder de la Asobal. Es algo que se puede decir ya tras sólo dos jornadas disputadas. Esto quiere decir que, aunque delante tendrá a un rival de mucho nivel, al menos será batible si hace un partido perfecto y al de delante no le salen las cosas. De hecho, el curso pasado ya derrotó el Liberbank Cantabria a dos equipos que llegaron a La Albericia con la vitola de segundos clasificados en ese momento.

El Sinfín da a conocer las medidas anti Covid que estrenará mañana

Tras comenzar la temporada con dos desplazamientos consecutivos a Puente Genil y Cuenca, el Sinfín se estrenará por fin en La Albericia mañana a partir de las cinco y media de la tarde. Recibirá al Guadalajara en un partido que será especial porque será la primera vez que el vetusto pabellón santanderino tenga que adecuarse a las medidas de seguridad decretadas por la crisis sanitaria y, con él, todos los asistentes al encuentro.

Como ya era conocido, el aforo máximo que permite el protocolo del gobierno autonómico establece un máximo de trescientas personas en el pabellón. «Para nosotros no es fácil poner tope a los socios, ya que muchos llevan año tras año al pie del cañón, pero hemos hecho lo posible para intentar ampliar el aforo y ha resultado imposible. Esperamos que pronto modifiquen la medida», decían ayer desde el club presidido por Servando Revuelta. El objetivo es que no se generan aglomeraciones y por eso las puertas del pabellón se abrirán a las cuatro y media de la tarde, una hora antes del inicio de la contienda para que la entrada sea progresiva.

Con el fin de mantener un cierto orden, se habilitará una sola puerta de entrada al pabellón, que será la número uno. En cambio, para salir, será la número cuatro. Y habrá que pensárselo bien cuando alguien decida entrar porque, a partir de ese momento, ya no se podrá salir hasta que finalice el partido. Ni siquiera en el descanso.

Cuando el aficionado cruce la puerta de entrada, pasará por una alfombra desinfectante, se tomará la temperatura y cada uno deberá desinfectarse las manos con gel hidroalcohólico que proporcionará el club. Además, cada persona deberá registrarse mostrando el carné de abonado.

Cada uno no podrá sentarse donde quiera, sino que los asientos estarán ya determinados y debidamente distanciados unos de otros para mantener la distancia de seguridad. En cuanto uno elija su butaca, ya no se podrá cambiar de sitio en todo el partido. Además, como el uso de la mascarilla es de uso obligatorio en todo momento, estará prohibido comer y beber durante el encuentro.

A pesar de las limitaciones, saldrán también entradas a la venta a un precio único de doce euros. Ayer ya estuvieron disponibles en las taquillas del club y hoy lo volverán a estar entre las 10 y las 13 horas por la mañana y entre las 17 y las 20 por la tarde. Será el primer partido de una nueva normalidad que sin duda será menos apasionante pero a la que no queda más remedio que amoldarse.

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