Las farmacias de Cantabria entregan desde ayer martes medicamentos hospitalarios para evitar desplazamientos innecesarios a determinados pacientes de riesgo, dentro de la estrategia para hacer frente a la crisis del coronavirus.

Se trata de una acción conjunta en la que colaboran la farmacia comunitaria, la hospitalaria y la distribución, dirigida a «minimizar» el riesgo de transmisión de la infección durante la actual emergencia sanitaria y con la que se protegerá la salud de los colectivos más vulnerables, como son los pacientes que presentan un elevado riesgo por tener posibles compromisos inmunitarios o fragilidad.

Los pacientes, seleccionados por el servicio de Farmacia Hospitalaria, podrán recoger sus medicamentos en su farmacia más cercana, con lo que se evitan desplazamientos, se favorece la adherencia a los tratamientos y se reduce la presión asistencial sobre los hospitales, ha informado el Colegio Oficial de Farmacéuticos (COF) de Cantabria en un comunicado. Este procedimiento, de carácter excepcional y transitorio mientras dure la emergencia, ha sido coordinado entre Grupo Igualatorio Cantabria, el Colegio de Farmacéuticos, la Distribución Farmacéutica en Cantabria y los servicios de Farmacia Hospitalaria de la Clínica Mompía.

PROTOCOLO DE ACTUACIÓN. Para desarrollarlo, se seguirá el mismo protocolo de actuación acordado con la Dirección General de Ordenación, Farmacia e Inspección de la Consejería de Sanidad y los Servicios de Farmacia Hospitalaria de otros hospitales de Cantabria, que ya se realiza en las farmacias desde el 24 de marzo.

El protocolo determina que el paciente será contactado directamente e informado por el Servicio de Farmacia Hospitalaria, que valorará la necesidad del mismo, y después se establece un sistema de trazabilidad desde la preparación a la entrega de los medicamentos en la farmacia, contando con la colaboración de la distribución farmacéutica.

El farmacéutico supervisará todo el proceso en colaboración con los servicios de Farmacia Hospitalaria, se dará continuidad al servicio de atención farmacéutica, se realizará el seguimiento farmacoterapéutico de los pacientes y se promoverá la adherencia al tratamiento.

Según la presidenta del Colegio de Farmacéuticos de Cantabria, Rita de la Plaza, en este escenario de estado de alarma los farmacéuticos están ofreciendo «soluciones excepcionales» para garantizar el acceso a los medicamentos, y las farmacias están respondiendo «de manera inmediata y profesional, con el esfuerzo adicional que supone la incorporación de nuevos procedimientos».

Las 274 farmacias de Cantabria, con sus 780 profesionales, ya están llevando a cabo este procedimiento, que reporta «inmensos beneficios» en la protección de la salud de los pacientes más vulnerables, ha asegurado.

De esta manera, según De la Plaza, muchos pacientes se verán beneficiados por una alternativa «más accesible, personalizada y eficiente» para el sistema. «La dispensación en las farmacias, además de acercar el medicamento, humanizar la atención, y reducir riesgos, evitará otros problemas asociados en el escenario excepcional que vivimos, como puede ser el abandono de los tratamientos», ha dicho. Por su parte, el director general del Grupo Igualatorio, Pablo del Corral, ha agradecido la labor que se está haciendo, tanto desde el Colegio de Farmacéuticos de Cantabria, como desde la Dirección General de Salud Pública.

«La puesta en marcha de este tipo de medidas es esencial para reducir el riesgo de contagio del Covid-19 entre los ciudadanos», ha señalado Del Corral, para quien es en estas situaciones cuando hay que demostrar «esa colaboración con la administración que desde la sanidad privada siempre hemos aclamado y defendido».

los Farmacéuticos se ofrecen a distribuir mascarillas a toda la población. Por otro lado, el Consejo General de Farmacéuticos de España ha ofrecido al Ministerio de Sanidad ser el canal de distribución controlada de mascarillas para toda la población en caso de que el Gobierno plantee su uso generalizado. La Organización Farmacéutica Colegial explica en un comunicado que las 22.100 farmacias que hay en España podrían garantizar el acceso a las mascarillas en condiciones de igualdad a todos los ciudadanos.

Esta solución, aseguran los farmacéuticos, evitaría el colapso de centros de salud, facilitaría un control absoluto mediante la receta electrónica e impediría la intromisión especulativa de supuestos distribuidores. Asimismo, el Consejo General de Farmacéuticos también ha ofrecido por carta a Sanidad realizar en farmacias las pruebas diagnósticas de la COVID-19.