La holandesa empieza con una demostración de tesón, en las series de 1.500, y de poder, en la final de 5.000, su asalto para lograr tres oros en Tokio.
Hijo de un militar estadounidense, su madre le crio sola desde que era una bebé y le llevó al atletismo para apartarle del motocross.
El español perdió a los puntos contra Julio César la Cruz en cuartos y se quejó amargamente de la decisión de los jueces: "Le conecté más golpes. Pero los jueces son los que mandan".