Los distintos cuerpos policiales con presencia en Torrelavega van a implementar un dispositivo especial durante las fiesta de La Patrona, que se desarrollarán del 12 al 21 de agosto, para prevenir posibles casos de sumisión química mediante los pinchazos que se han denunciado en otras fiestas durante el verano.

Así, durante estos días, se reforzará la vigilancia y la colaboración con los guardas de seguridad de los conciertos, tanto para conocer los motivos de los posibles pinchazos como las consecuencias de los mismos en las víctimas, así como para poder esclarecer este tipo de agresiones.

El dispositivo incluirá efectivos de la Unidad de Prevención y Reacción se encargará de la vigilancia en los eventos más multitudinarios, como el pregón inaugural, los conciertos y la Gala Floral, pero también tendrá presencia en otros actos y momentos.

Además, unidades de la Caballería de la Policía Nacional patrullarán las calles y desde el aire lo hará el helicóptero de este cuerpo, que reforzarán la labor de la Policía Local.

Para la coordinación de estos efectivos, hoy se ha celebrado en Torrelavega una reunión de la Junta Local de Seguridad presidida por el alcalde, Javier López Estrada, junto a representantes de la Delegación del Gobierno, la Policía Nacional, la Guardia Civil, la Policía Local, Protección Civil de Torrelavega, entre otros.

Tras la reunión, se ha hecho un llamamiento a las posibles víctimas de pinchazos para que denuncien los casos ante la Policía, con el fin de investigar los hechos, pero que acudan a los servicios de sanitarios para la detección temprana de las sustancias que les hayan podido inyectar.

NIVELES DE CRIMINALIDAD. En un comunicado, el concejal de Seguridad, Pedro Pérez, ha destacado que las medidas puestas en marcha en los meses anteriores «están surtiendo efecto» y en la actualidad la ciudad está en unos niveles de criminalidad «muy similares a los de 2019». Hasta julio se habían contabilizado 700 delitos en Torrelavega, por debajo de la media nacional y dentro de la media de Cantabria, destacando la eficacia en el esclarecimiento de esos delitos.

Según Pérez, la mitad de los delitos graves y muy graves se resuelven, un porcentaje, a su juicio, «muy superior a la media nacional y de otras ciudades».

Respecto al tipo de delitos, se ha referido al repunte de los cibernéticos y asociados al incremento del comercio electrónico, aunque desde la Policía Nacional se ha insistido en la prevención para evitar que los ciudadanos sean víctimas de los mismos.

Sobre los grupos delictivos itinerantes que actúan en la Cornisa Cantábrica, Pérez ha detallado que Torrelavega, por su situación en materia de carreteras y autovías, «es especialmente vulnerable», por lo que se está incidiendo en la colaboración de la Policía Local con la Policía Nacional

En cuanto a la violencia de género, Pérez Noriega ha dicho que los datos son similares a años anteriores, con 63 casos contabilizados, de los que 7 son de riesgo medio y 56 bajo o no apreciado, sin ninguno de alto riesgo.

Las enfermeras alertan de riesgos asociados a los ‘pinchazos’

El Consejo General de Enfermería (CGE) ha alertado este jueves que los pinchazos que están denunciando muchas chicas en entornos de ocio las expone, además de los riesgos asociados a las sustancias que se les están inyectando, a otros derivados de los materiales empleados, como son infecciones por VIH o hepatitis.

El CGE ha puesto ya en alerta a los Consejos Autonómicos de Enfermería y a los colegios provinciales sobre los riesgos que pueden suponer las sustancias inoculadas, como son inhibición de la voluntad, incapacidad para defenderse o tomar decisiones, caída de la presión arterial, pérdida de la consciencia son algunos de los síntomas. Peor aún puede ser en personas con algunas patologías asociadas a tratamientos farmacológicos, que pueden tener reacciones adversas frente a estas sustancias, sin olvidar las otras posibles que hayan consumido voluntariamente que, al mezclarse con una nueva dosis de otra droga, podría acarrear una intoxicación mayor.