Bajo el paradigma de la educación como bastión de la sociedad, la trascendental problemática del acoso escolar en Cantabria ha cobrado una relevancia ineludible en los últimos años. Un fenómeno que ha visto un alarmante aumento, manifestándose no solo en las consultas por esta causa, sino también en la activación de protocolos y en las situaciones confirmadas. En el curso académico 2022-2023, se registraron un total de 28 casos, lo que ha suscitado la urgente necesidad de implementar medidas más exhaustivas y eficaces.

«Hoy, en el primer jueves de noviembre, la UNESCO lidera la conmemoración del Día Internacional contra la Violencia y el Acoso Escolar, incluyendo el ciberacoso. Este evento anual busca concienciar y promover la prevención de estas situaciones, sirviendo como catalizador para unir esfuerzos a nivel global.»

La magnitud de esta cuestión en los ámbitos educativos no pasa desapercibida, siendo respaldada por el hecho de que en mayo pasado, el Ministerio de Educación presentó el pionero Estudio Estatal de Convivencia Escolar en Educación Primaria. Un análisis exhaustivo que abarcó datos de 37,000 alumnos, docentes, familias y equipos educativos, revelando que un 9.53% de los estudiantes de Primaria se siente acosado, mientras que un 9.2% ha experimentado ciberacoso. Además, un 4.58% admite haber acosado y un 4.62% haber cometido ciberacoso.

«En este contexto, la necesidad de crear ambientes escolares seguros se erige como una prioridad ineludible para la Administración educativa. Según la Consejería de Educación de Cantabria, la seguridad en el entorno educativo es esencial para propiciar procesos educativos participativos y compartidos.»

Con el fin de erradicar el acoso escolar, la Administración educativa ha intensificado la formación específica para el profesorado y ha implementado planes, programas y protocolos en los centros educativos. Estos esfuerzos buscan mejorar la seguridad de todos los miembros de la comunidad educativa, fomentar canales efectivos de comunicación entre docentes y alumnos, y aumentar el sentimiento de pertenencia a través de la responsabilidad compartida y la implicación en la mejora del clima afectivo de la comunidad educativa.

«No obstante, a pesar de estos esfuerzos, Cantabria experimenta un preocupante aumento, según datos facilitados por la propia Consejería. Las consultas han aumentado de 80 en el curso 2017-2018 a 302 en el pasado curso 2022-2023. Asimismo, los protocolos activados y las situaciones de acoso confirmadas han experimentado un incremento sustancial, pasando de 47 protocolos hace cinco años a 146, y de 5 a 28 casos confirmados.»

Ante esta compleja realidad, la Federación de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos (FAPA) de Cantabria lamenta que, a pesar de los esfuerzos y medidas implementadas, las familias afectadas a menudo se ven obligadas a buscar soluciones por sí mismas. Chema Torre, portavoz de la federación, advierte sobre la gravedad del problema y destaca la importancia de no subestimar el acoso escolar. Al mismo tiempo, hace hincapié en la necesidad de no convertir a los niños en delincuentes, subrayando la relevancia de un abordaje integral y comprometido por parte de la sociedad y las autoridades educativas. Un llamado urgente para enfrentar este desafío con determinación y solidaridad.

EN BREVE

Prevalencia del ‘bullying’ en las aulas españolas

El bullying, o acoso escolar, es un fenómeno preocupante en España. Según estudios recientes, aproximadamente el 10% de los estudiantes españoles ha experimentado algún tipo de acoso, ya sea físico, verbal o social, durante su etapa escolar. Este problema afecta tanto a niños como a adolescentes, generando consecuencias negativas en su bienestar emocional y rendimiento académico.

Consecuencias sociales y psicológicas

El bullying deja secuelas profundas en las víctimas, afectando su salud mental y social. Se ha observado un aumento en casos de ansiedad, depresión y aislamiento entre los afectados. Además, el miedo constante al acoso puede tener repercusiones a largo plazo en la autoestima y la confianza de los jóvenes, generando un ambiente escolar poco saludable.

El rol de las redes sociales en los menores

Las autoridades educativas y organizaciones en España están tomando medidas para abordar el bullying. Se han implementado programas de prevención en las escuelas, que incluyen charlas educativas, protocolos de actuación y la promoción de un ambiente escolar seguro y respetuoso. Sin embargo, aún queda trabajo por hacer para erradicar completamente este problema y garantizar que todos los estudiantes puedan disfrutar de un entorno educativo libre de acoso.

La Importancia del Apoyo Familia

El apoyo familiar juega un papel fundamental en la prevención y superación del bullying. Padres y cuidadores deben estar alerta a los signos de acoso, fomentando la comunicación abierta con sus hijos. Una red de apoyo sólida en casa puede ayudar a las víctimas a superar las secuelas emocionales.