En un incidente registrado el pasado viernes en la calle Calvo Sotelo, la Policía Local de Santander llevó a cabo una intervención crucial que culminó con la detención de una mujer de 40 años. La detenida, cuya identidad no ha sido revelada, había violado una orden de alejamiento emitida por el Juzgado de lo Penal Nº 5 de Santander, la cual le prohibía comunicarse o acercarse a menos de 300 metros de un varón de 36 años.

La situación se tornó aún más seria cuando la policía encontró a la mujer junto al hombre en cuestión, en clara contravención de la orden judicial. Se iniciaron de inmediato las diligencias judiciales pertinentes por un supuesto delito de quebrantamiento de condena, subrayando la gravedad de la situación y la importancia de hacer cumplir las disposiciones judiciales destinadas a proteger a las partes involucradas.

Este incidente resalta la labor incansable de la Policía Local en garantizar el cumplimiento de las órdenes judiciales y salvaguardar la seguridad de la comunidad, especialmente en casos sensibles como este, donde la violación de una orden de alejamiento puede tener consecuencias graves para todas las partes implicadas.