El espectacular nuevo centro cívico de Castilla-Hermida, que alberga el jardín vertical interior más grande de Europa visible en todas las plantas e incluye una cubierta transitable con vistas a la bahía de Santander, abrió ayer sus puertas en el antiguo edificio de Tabacalera, que se ha transformado interiormente por completo tras una inversión municipal de 4,8 millones de euros.

La alcaldesa Gema Igual, acompañada de los concejales de Fomento y de Barrios, César Díaz y Carmen Ruiz, así como los representantes de las asociaciones de vecinos de la zona, inauguró un edificio con el que el Ayuntamiento ha recuperado patrimonio de la ciudad y ha convertido sus 2.800 metros cuadrados en un espacio moderno, accesible y eficiente energéticamente, dotado con múltiples salas para atender las diferentes necesidades de los ciudadanos.

«Ponemos a disposición de los más de 20.000 habitantes de la zona, y de todos los santanderinos, estas instalaciones para que puedan disfrutarlas al máximo, desde el amplio vestíbulo, con un doble acceso por dos calles y el salón de actos transparente con el gigantesco mural vivo de flores y plantas, hasta la enorme cubierta transitable con unas vistas únicas a la bahía y al puerto», ha resaltado la regidora santanderina.

Igual ha compartido con los asistentes a la inauguración su admiración al contemplar el jardín vertical, de casi 600 metros cuadrados, situado en el extremo izquierdo de la gran zona de entrada al lado del vanguardista salón de actos acristalado y con gradas, que albergará distintos usos. «He querido esperar a verlo ahora y los vecinos me han visto la cara de asombro y yo la de ellos, algo maravilloso, porque contemplarlo en vivo es realmente increíble», ha manifestado.

Por ello, a partir del lunes, todos los santanderinos que deseen conocerlo pueden reservar cita previa inscribiéndose en el centro o en el correo [email protected]. «Se realizarán visitas guiadas totalmente gratuitas de grupos reducidos de seis personas en horario de 11 a 13 horas por la mañana y de 4 a 8 por la tarde», ha precisado César Díaz, quien también ha indicado que el recorrido tendrá una duración de 15 o 20 minutos.

Almacén de tabaco. Pero los alicientes del flamante centro cívico son muchísimos más. Desde el diseño interior con guiños al antiguo uso del edificio como almacén de tabaco, la elegancia de los colores, los juegos de luces y, por supuesto, la excelente distribución interior con mobiliario y todos los medios técnicos necesarios para los distintos usos que alberga.

Así, tal y como ha explicado Gema Igual, la planta baja dispone de dos accesos desde las calles Leopoldo Pardo y Antonio López, y el área central está destinado al salón de actos, un espacio cerrado con tabiques móviles de vidrio que permiten la visualización funcional desde el exterior o su retirada para configurar un único espacio o plaza cubierta al sumarse a la zona de uso público general que lo rodea.  El salón de actos cuenta con una grada retráctil que se puede recoger en el fondo y se ha habilitado también en la planta baja, en un nivel superior, la cabina de control, almacén e instalaciones.

Por lo que respecta a la primera planta del edificio, se destina a la unidad de trabajo social (con despachos, secretaría, zona de espera y archivo), así como a una amplia sala multiusos que está destinada a ludoteca y ya cuenta con un atractivo mobiliario para los niños e incluso juguetes y diversos elementos de aprendizaje.

En la segunda planta se ubican salas para talleres, varias de ellos acondicionadas también con tabiques móviles para unir espacios, así como un local para la asociación de vecinos. La Fábrica de Creación ocupa la tercera planta del edificio, un lugar de formación y experimentación artística que cuenta con una sala de artes escénicas, para la danza o expresión corporal, con un escenario adaptado para amortiguar el baile y móvil que se puede trasladar a otras zonas del edificio. 

Revelado fotográfico. También dispone de un área de revelado fotográfico; otra de creación multimedia dotada con equipos Mac, que son los que se necesitan para la videocreación; otra de Artes Plásticas con muros móviles que se puede convertir en dos aulas o una para utilizar como espacio expositivo; e incluso un plató de grabación para creación audiovisual y actores totalmente dotado, con cámaras, croma y demás elementos técnicos necesarios.

Por último, en la cubierta hay un espacio cerrado interior –con unas mesas y sillas- y otro exterior polivalente así como una amplia terraza exterior transitable donde se podrán organizar actividades al aire libre. De esta manera, «se pone en valor la cubierta como un espacio de uso, generando un mirador sobre la bahía, al tiempo que se recupera el uso existente en el proyecto original, como terraza-jardín», ha añadido la alcaldesa.

También ha subrayado que el Ayuntamiento ha conseguido llevar a cabo estas obras, ejecutadas por la UTE Teginser-Senor, gracias a un acuerdo de cesión con Patrimonio del Estado para revalorizar este edificio de carácter racionalista, cerrado desde el año 1993, que se corresponde con los primeros pasos en España del denominado estilo internacional «y ponerlo a disposición de los vecinos», ha apostillado Gema Igual.

Por su parte, el arquitecto Luis Fernández del Arco, uno de los responsables del proyecto junto a Eva de la Fuente, ha destacado que con esta actuación se ha respetado la historia de la ciudad y su relación con el puerto, la memoria de su uso como almacén de tabaco «y se han aplicado elementos de arquitectura biofílica, para que las personas puedan crear una relación con la naturaleza en cada una de las plantas».