San Vicente de la Barquera es un precioso pueblo de Cantabria, situado en la costa occidental de la región, que cuenta con un privilegiado entorno en pleno Parque Natural de Oyambre, una excelente gastronomía, una inigualable costa, unos preciosos e íntimos rincones, y mucha tradición. 

Tanto es así, que las leyendas urbanas cuentan que si se cruza el Puente de la Maza conteniendo la respiración a la vez que se pide un deseo, se cumple. Una tradición que se ha convertido en un emblema para la villa.

Los habrá supersticiosos, o no, pero lo que es innegable es que todas las personas que han pasado por este puente, han aguantado la respiración, han cerrado los ojos y han deseado algo con todas sus fuerzas. 

Y eso es lo bonito de estas cosas, que cada uno puede decir lo que sea. Tal vez, en el futuro ese deseo se convierta en realidad, y te quedarás amarrado de por vida a este pueblo tan bonito de Cantabria.

Aparte de este Puente de los Deseos, San Vicente de la Barquera tiene un castillo, que se encuentra en la Puebla Vieja, y que es el protagonista de todas las postales que se toman de la villa.

El también conocido como Castillo del Rey, está edificado sobre una elevación rocosa, adaptándose su planta a las irregularidades del terreno. Su forma general es alargada, de más de cincuenta metros de largo por unos veinte de ancho.

El pueblo también cuenta con la iglesia de Santa María de los Ángeles, uno de los ejemplos más destacados de la arquitectura gótica en Cantabria.

La villa atesora, entre otras muchas joyas, una Torre del Preboste, que en sus orígenes era la residencia del preboste, encargado de la recaudación de impuestos durante la Edad Media.

Posteriormente, fue una cárcel, y en la actualidad tras su restauración, se ha convertido en un centro cultural cuyo uso está destinado a exposiciones y actividades culturales.

Lo bonito de San Vicente de la Barquera es recorrer su casco histórico histórico e ir atravesando las calles de la Puebla Vieja. El mar siempre está presente en el camino, y la belleza del lugar hace que uno se sienta en un entorno mágico.

Este pueblo está considerado como uno de los más bonitos de la región por todo el patrimonio histórico, cultural, artístico y gastronómico que integra. Además, como curiosidad, cuenta con un vecino ilustre, el cantante David Bustamante.

El que fuera triunfito siempre que puede aprovecha sus días libres y se acerca hasta la villa marinera en la que nació, en Cantabria, esa tierra que “me vio nacer, crecer y enamorarme”.