25.04.2024 |
El tiempo

ASCENSO DEL RACING

Qué día el de hace un año

Hoy se cumplen 365 días del ascenso del Racing | De los que lo lograron, sólo Pol Moreno fue titular el viernes | También hoy podría quedar la permanencia casi certificada si pierde el Málaga

La plantilla mantea a Pablo Torre, uno de los grandes protagonistas del ascenso del Racing. / efe
La plantilla mantea a Pablo Torre, uno de los grandes protagonistas del ascenso del Racing. / efe
Qué día el de hace un año

Hoy se cumple exactamente un año del Primero de Mayo más importante para los aficionados del Racing. Aquel día, los trabajadores tuvieron que elegir entre acudir a la tradicional manifestación que reclama mayores y mejores derechos para la clase obrera y acudir a Los Campos de Sport. Hubo que elegir entre mamá o papá. En muchas casas ambas citas tienen un carácter religioso pero es posible que pudiera más la condición excepcional que tenía el partido, ya que el conjunto cántabro se estaba jugando el ascenso. Se anunciaba fiesta y quien viste con orgullo los colores verdiblancos ha tenido que comer tanto barro en los últimos tiempos que no podía dejar pasar por alto algo así. Había que acudir, celebrar y divertirse. Vaya día el de hace un año.

El Racing recibía al Celta B y le bastaba con no perder para certificar su ascenso. Sabía que esto iba a suceder antes o después porque tenía tanta ventaja que nadie aspiraba a destronarle, pero parecía el día indicado para hacerlo. Nadie quería dejarlo para más tarde porque todo estaba organizado para ese día. Lo ideal es siempre subir en casa y por eso el aficionado acudió a Los Campos de Sport como si de una final se tratara. Perder apenas tendría consecuencias clasificatorias pero si anímicas. Tenía que ser ese día. El primero de mayo. El racinguismo se vistió de gala y, de hecho, llenó al completo las gradas de El Sardinero.

El equipo no falló pero estuvo cerca de hacerlo, por lo que la fiesta fue completa, ya que el partido incluso contó con la incertidumbre del resultado y, por lo tanto, con una agonía en los últimos minutos que hizo que la explosión de júbilo final estuviera a la altura de lo conseguido. Había miedo a no valorar o celebrar en su justa medida un premio tan gordo por haberlo conseguido con tanta solvencia y superioridad durante una segunda vuelta para enmarcar pero fue ese miedo en el cuerpo que incluso llegó a poner en el aficionado el Celta B lo que dio un sabor totalmente futbolístico a la cita.

El Racing se había adelantado 2-0 a las primeras de cambio con un gol de Unai Medina y otro de Cedric al empujar un pase de la muerte de Pablo Torre. Aquello parecía un trámite. Todo parecía hecho pero el filial celeste consiguió empatar el partido al marcar uno en el 44 y otro en el 52. Quedaba mucho encuentro por delante y, por lo tanto, mucho margen para que pasaran cosas que no le interesaban al conjunto cántabro, pero no pasó nada más. Se llegó a ese empate que inició una tremenda fiesta en Santander que se prolongó hasta bien entrada la noche. Primero hubo baño de multitudes en autobús desde el estadio hasta el Ayuntamiento y allí el habitual encuentro con los aficionados desde el balcón. La verdad es que salió todo bien.

Volvió aquel día el Racing a Segunda tras un par de años nefastos, primero con el triste descenso y después con la peor temporada de su historia. Por eso había mucho que celebrar. Hoy, un año después, por fin el conjunto cántabro puede decirse a sí mismo que sirvió para algo porque está muy cerca de certificar la permanencia.

De hecho, ésta podría quedar prácticamente solventada justamente esta tarde, 365 días después de toda aquella fiesta. Y no es por algo que dependa de él porque el equipo verdiblanco ya hizo los deberes el pasado viernes. Es el Málaga quien podría permitir una nueva celebración racinguista un Primero de Mayo.

El equipo malagueño juega a las seis y media contra el Huesca. Todo lo que no sea una victoria por su parte le dejará prácticamente noqueado. Si pierde, el Racing se escapará a ocho puntos más el golaverage, que son muchos teniendo en cuenta que sólo quedan cuatro partidos por jugarse y, por tanto, doce puntos. La permanencia no sería matemática pero sí virtual. Un empate dejaría el colchón en siete puntos, que también serían muchos.

Quien ayer dijo adiós a su posibilidad de alcanzar al Racing fue la Ponferradina, que perdió 3-2 tras un partido dramático, ya que llegó a adelantarse 0-2 en la primera media hora de encuentro.

Ya es carne de Primera Federación. Con todo, si algo bueno tuvo la victoria verdiblanca fue que consiguió meter a más equipos en el ajo. Tanto es así que incluso una victoria del Málaga hoy podría tener su parte positiva, ya que permitiría que el Huesca terminara la jornada empatado a puntos con el conjunto cántabro. Hay que reconocer que la cosa se le ha puesto bien al equipo pilotado por José Alberto.

Éste acostumbra a incidir en el tamaño del éxito que el Racing está cerca de conseguir, ya que el Racing ha sido incapaz de mantenerse en Segunda División las tres últimas veces que ha militado en ella. No lo logró en la campaña de Unzué, Fabri, Gay y Menéndez, tampoco en la de Paco Fernández y Munitis y menos aún en la de Ania, Cristóbal y Oltra. Para recordar un éxito del conjunto cántabro en la categoría de plata hay que remontarse a principios de siglo, cuando no sólo se mantuvo, sino que, con Quique Setén en el banquillo, incluso logró el ascenso a Primera con ese gol de Moratón en la jornada final que forma parte de la historia del club.

Por eso cuando hace un año el racinguista celebraba un nuevo ascenso lo hacía con la confianza de que a la cuarta fuera la vencida. Había que romper el refranero. En el balcón hubo jugadores que han acompañado al equipo en Segunda aunque, curiosamente, en el once inicial del partido del pasado viernes contra el Ibiza sólo estuvo uno de ellos. Fue Pol Moreno, que ni siquiera ha tenido apenas oportunidades de jugar en la segunda vuelta. Sí han sido figuras fundamentales en la nueva categoría Parera e Íñigo ya fuera con Fernández Romo o con José Alberto. Satrústegui lo fue con el madrileño pero desapareció con el asturiano mientras que han ido apareciendo de manera puntual Unai Medina, Fausto Tienza, Arturo y Mantilla.

La temporada de Cedric ha estado condicionada por su paso por el quirófano y Bobadilla, que ha recibido el alta tras operarse del hombro, está cerca de completar el curso en blanco. No todos los sueños individuales que probablemente tuviera cada uno en el balcón del Ayuntamiento se cumplen pero el colectivo está a un paso de hacerlo.

Qué día el de hace un año
Comentarios