del Racing a los entrenamientos trajo buenas noticias. No se detectó ningún positivo más en el seno de la plantilla y, por lo tanto, el cuerpo técnico pudo respirar aliviado, ya que era fácil ponerse en lo peor y en la posibilidad de incorporar a más jugadores a las garras de Ómicron. Lejos de eso, Fernández Romo recuperó futbolistas. No sólo a los afectados por el maldito coronavirus, sino también a aquellos que habían terminado la pasada semana con algunos problemas físicos. De esta manera, el técnico sólo está a la espera de que Yeray y Simón Luca se vuelvan a subir al carro para presumir de disponer de todos sus futbolistas, algo que muy pocos pueden decir.

Fue ayer por la tarde cuando los jugadores verdiblancos se volvieron a reunir en las instalaciones Nando Yosu. Lo hicieron después de prácticamente tres días desde la última vez que se habían ejercitado allí, ya que habían pasado el domingo y el lunes completos más la tarde del sábado y la mañana de ayer lunes. Tanto tiempo generó una cierta preocupación porque, teniendo en cuenta el porcentaje de positivos que se vienen detectando en Cantabria en las últimas semanas, era fácil prever que alguno apareciera entre más de veinte examinados. Pero hubo suerte. No se detectó ninguno.

Y es que, como viene siendo habitual desde que los jugadores volvieran de las vacaciones navideñas, antes de ponerse en acción se sometieron a una ronda de antígenos. Y todos los superaron con éxito. Entre ellos estaban Unai Medina y Miquel Parera, que se habían pasado confinados toda la semana pasada. El lateral derecho vasco había dado positivo apenas unas horas antes del partido contra el San Sebastián de los Reyes, el cual lo disputó con aparente normalidad el portero balear. Sin embargo, al día siguiente fue él quien vio dos rayitas en el test que detecta el Covid. Ambos cumplieron los siete días de rigor aislados sin apenas síntomas y ahora ya están a disposición de su entrenador para el encuentro del próximo sábado en Las Gaunas.

Yeray y Simón, que son los únicos que se mantienen confinados, dieron positivo justamente hoy hace siete días, por lo que, en principio, se les espera para el entrenamiento de mañana. Está por ver si les da tiempo a entrar en los planes de Guillermo Fernández Romo para el encuentro contra la SD Logroñés del sábado. Justamente se reincorporarían a la rutina en la sesión habitualmente más suave de la semana, que es la que se celebre a 48 horas del encuentro, por lo que sólo contarían con el entrenamiento del viernes para recuperar sensaciones. Es probable que el técnico tenga que buscar una alternativa para el lateral izquierdo.

el peligro. Con todo, el conjunto cántabro, como los demás, también está a expensas de lo que suceda en los próximos días. Que ayer no diera nadie positivo no quiere decir que no lo vayan a dar hoy, mañana o pasado. De hecho, ahí está la experiencia del propio Unai Medina, que pasó de dar negativo un viernes a positivo un domingo. La amenaza va a estar siempre ahí y es especialmente importante estos días, ya que quien caiga en las garras de Ómicron a partir de hoy se puede despedir de participar en los tres importantes envites que le esperan al Racing en ocho días, primero en Logroño, después en casa contra el Racing de Ferrol y por último en La Coruña contra el líder.

Lo mejor de ayer es que no sólo hubo pleno de negativos en la ronda de antígenos, sino que Borja Domínguez y Álvaro Bustos, que habían arrastrado problemas físicos la semana pasada, se pudieron ejercitar con total normalidad. En el caso del primero era una caso especialmente importante, ya que su presencia en Logroño se antoja fundamental por la baja por sanción de Íñigo. El capitán verdiblanco vio la quinta cartulina amarilla de la temporada en el primer partido del año y deberá ver en la grada el encuentro ante el equipo de la capital riojana. De este modo, lo más probable es que el doble pivote esté formado por el citado centrocampista gallego y por Fausto Tienza. Además, es una posición que apenas corre peligro porque ambos jugadores ya pasaron el Covid durante el parón navideño.

El reencuentro de ayer tras descansar de la intensa carga de trabajo que soportaron los jugadores verdiblancos la semana pasada se produjo en el campo Santi Gutiérrez Calle de las instalaciones Nando Yosu. Fue, como es habitual con este cuerpo técnico, una sesión corta pero muy intensa donde se disputaron partidillos a campo reducido. Para hoy, Guillermo Fernández Romo ha programado una doble sesión de trabajo. La matinal será convencional sobre el terreno de juego y ya por la tarde tocará un entrenamiento más físico. Sobre todo, será una sesión en el gimnasio. Es importante volver a ponerse a tono ahora que la competición va a volver a reiniciarse tras prácticamente una semana parados. De hecho, ayer se cumplió exactamente un mes desde el partido del conjunto cántabro en Almendralejo y, desde entonces, el Racing sólo ha disputado el encuentro contra el San Sebastián de los Reyes.

Con quien aún no podrá contar hoy el cuerpo técnico es con Pablo Torre. Éste no ha disfrutado del mismo descanso que sus compañeros porque el lunes se marchó a Alicante, donde ha permanecido concentrado con la selección sub 19. Ésta está preparando el asalto definitivo al Europeo de la categoría de este verano y en la costa mediterránea ha completado una serie de intensos entrenamientos que concluirán hoy mismo. De este modo, la perla de Soto de la Marina no se presentará en La Albericia hasta mañana. Es probable que dedique el día a recuperar y, por tanto, contará con el encuentro del viernes para preparar con mimo el encuentro de Las Gaunas.